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Violencia, génesis del desplazamiento infantil
Para el think tank, los elevados crímenes de las pandillas, así como la pobreza, son el origen del alza en el número de niños que deja su país de origen en Centroamérica.
El aumento de casi 50% de niños centroamericanos rescatados en México, durante la primera mitad del 2015, sugiere que los altos niveles de violencia de pandillas en la región del Triángulo del Norte siguen actuando como un importante generador de desplazamiento, de acuerdo con David Gagne, de InSight Crime.
El Instituto Nacional de Migración de México (INM) informó en junio del año en curso que las autoridades rescataron a 11,893 menores de Centroamérica en los primeros cinco meses del 2015, un incremento de 49% en relación con el mismo periodo del 2014. La mayoría de ellos provenía de El Salvador, Honduras y Guatemala; países que integran el denominado Triángulo del Norte.
De acuerdo con las cifras del INM, más de la mitad de los menores viajaban solos o estaban acompañados por un traficante de personas. De los niños, 72% fueron rescatados en Tabasco, Veracruz y Chiapas.
Este aumento de rescates coincide con una significativa disminución de cruces de centroamericanos en la frontera entre Estados Unidos y México. Ello sugiere que los altos índices de violencia de pandillas en el Triángulo del Norte, una de las causas que se suelen citar para explicar la oleada de niños migrantes el año pasado, sigue haciendo que los niños abandonen sus hogares , observa Gagne.
El analista de InSight Crime observa otros factores determinantes que impulsan la migración infantil desde el Triángulo del Norte, como altos niveles de pobreza.
Un estudio realizado en el 2014 por el Proyecto de Opinión Pública de América Latina (LAPOP, por sus iniciales en inglés) no logró establecer una correlación clara entre la inseguridad en la región y los patrones de migración de menores de edad.
Cabe mencionar que la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por su sigla en inglés) reportó en fechas recientes que los menores continúan huyendo de El Salvador, Honduras y Guatemala, y México los está deportando en cantidades masivas.
Entre octubre del 2014 y abril del 2015 México detuvo a 92,889 personas centroamericanas, más del número total de centroamericanos que detuvo la Patrulla Fronteriza en la frontera sur de Estados Unidos en este mismo periodo, expone la WOLA.