AIG da "el todo" por recuperar su imperio

El presidente ejecutivo de la aseguradora dijo que el gobierno podría no vender nunca su participación de 79.9% en la aseguradora, que debió ser rescatada por el Estado el año pasado.

Eward Liddy se mostró optimista en la junta general de accionistas sobre las posibilidades de la aseguradora de devolver los fondos al gobierno, mientras trata de recuperarse de fuertes pérdidas ligadas a instrumentos derivados.

AIG perdió U$99,000 millones el año pasado, fundamentalmente debido a su exposición a instrumentos de swaps de créditos, y ha estado bajo fuerte presión por los bonos que pagó a los ejecutivos de su unidad de productos financieros, fuente de gran parte de sus pérdidas.

Los rescates dejaron al gobierno con una participación de casi 80% en la compañía, que está tratando de vender activos para repagar U$83,000 millones en créditos estatales.

"No puedo darles la seguridad de que esto cambiará", dijo respecto a la porción en manos del Estado Liddy, quien fue nombrado como presidente ejecutivo de AIG por el gobierno en septiembre.

Pero agregó que hay "una excelente posibilidad" de que se le pague al gobierno.

La semana pasada, AIG dijo que planeaba darle participaciones en dos grandes aseguradoras de vida al Banco de la Reserva Federal de Nueva York para reducir la deuda con el gobierno en cerca de U$25,000 millones.

• Vende activos

La aseguradora estadounidense dijo que accedió a vender su negocio de tarjetas de crédito en Taiwán al banco Far Eastern International Bank.

Los términos del contrato no fueron revelados. Se espera que la operación, sujeta a la aprobación por parte de reguladores financieros, sea completada durante el tercer trimestre.

Liddy dijo que AIG está tratando de decidir qué hacer con su unidad de arriendo de aviones, International Lease Finance Corp.

Afirmó que la unidad de productos financieros ha reducido casi a la mitad su exposición a derivados a U$1.4 billones desde 2.7 billones, y que a fin de año "nuestro riesgo debiera reducirse sustancialmente desde su estatus actual".

Las acciones de AIG, que llegó a ser la mayor aseguradora del mundo por valor de mercado, han cotizado por debajo de los U$2 casi todo el año.

A las 1600 GMT, se hundían 12.78%, a U$1.16.

• Abandonan el barco

AIG mantuvo su junta anual en un edificio corporativo contiguo a su casa matriz en Wall Street. Ambas propiedades están en venta.

Esta fue la primera oportunidad pública de los accionistas de mostrar su frustración desde el derrumbe financiero de AIG.

A pesar de ello, llegaron menos de 200 personas, un número bastante más bajo que hace un año, y la reunión duró menos de una hora.

Todas las propuestas de la compañía fueron aprobadas, excepto una vinculada al número de acciones autorizadas.

Todas las propuestas de los accionistas fueron rechazadas.

AIG había postergado su junta anual, que usualmente hacía en mayo, para darle más tiempo a la reestructuración de su directorio, que fue renovado casi completamente durante el último año.

"Ellos parecen ratas abandonando el barco que se hunde: adiós y buen viaje", dijo el accionista Kenneth Steiner de Great Neck, Nueva York, en la junta, en referencia a los directores que se fueron.

RDS/doch