Aún no hay acuerdo para compra de Credicard: Itaú

El mayor banco privado de Brasil, Itaú Unibanco Holding, informó que no ha alcanzado un acuerdo para comprar la unidad brasileña de tarjetas de crédito y banca de consumo de Citigroup.

"El banco está evaluando todas las operaciones posibles, pero en este momento no hay ningún acuerdo o transacción de cualquier tipo para ser reportado", informó la institución en un comunicado enviado a la Comisión de Valores Mobiliarios de Brasil (CVM).

Medios brasileños reportaron que ambos bancos habían llegado a un acuerdo para la compra de Credicard, filial de Citigroup, por 3,000 millones de reales (1,500 millones de dólares).

DESPEJAN CAMINO

El pasado 30 de abril, Rogerio Calderón, director de Relaciones con Inversionistas de Itaú informó que el banco privado presentó una propuesta para la compra de Credicard en Brasil, que también despertó el interés de Banco Bradesco y Banco Santander Brasil, pero éstos habrían quedado fuera de la carrera, según dijo Diario Financiero, que cita fuentes del periódico brasileño Valor.

Los tres bancos presentaron sus ofertas preliminares el 12 de abril y los montos habrían rondado los 2,000 millones de reales (998 millones de dólares), cerca de dos veces el patrimonio líquido de Credicard. En el proceso habrían participado también Banco do Brasil y BTG Pactual, pero finalmente no presentaron propuestas.

Tras una primera fase, el banco estadounidense lanzó una segunda ronda de negociaciones pidiendo a los interesados una serie de ajustes a sus ofertas, que fueron presentados la semana pasada. Tras este paso, Citi informó a los tres contendientes que ahora se encuentra en conversaciones exclusivas con Itaú, y las fuentes aseguran que el resultado del proceso se daría a conocer la próxima semana.

El paquete en venta incluye las tarjetas de Credicard y de su promotora de ventas Credicard Financiamentos, con cerca de 100 sucursales, que representan cerca de 5% del mercado local de tarjetas en volúmenes transados.

Para Itaú es casi una cuestión de honor quedarse con Credicard. El banco no podía dejar que una base de clientes que fue creada originalmente por él, junto con Unibanco y Citi, caiga en manos de un competidor que no participó en su creación , dijo a Valor una fuente cercana.

Itaú y Citigroup eran socios originalmente en Credicard, pero en 2006, Citigroup compró el 50% del brasileño en la propiedad por 280 millones de reales (US$ 139 millones).

JUGADA ESTRATÉGICA

El interés de Itaú sería traer de regreso a su operación las tarjetas de clientes que hoy usan medios de pago de Credicard. Según un ejecutivo citado por Valor con acceso a las cifras del banco, Credicard tiene una cantidad relevante de cuentacorrentistas de Itaú.

La jugada también le permitiría mantener su ventaja frente a Bradesco, que ha acortado la distancia en un mercado que movió 724,300 millones de reales (361,200 millones de dólares) en 2012.

Según estimaciones de mercado, la participación de Itaú asciende a poco más de 30% del volumen de las transacciones. Bradesco, en tanto, está prácticamente empatado con Banco do Brasil, con cerca de 20%, mientras que Santander tiene 7 por ciento.

El presidente de Itaú, Roberto Setubal, aún está estudiando los detalles finales de la operación para asegurar una integración eficiente de ambos negocios. Las discusiones con Citi girarían en torno al futuro de los 1,200 empleados de Credicard y los costos de eventuales despidos.

Al igual que Itaú, Bradesco y Santander habían expresado dudas sobre ese punto y las tres entidades concuerdan en que la estructura de Credicard está inflada y debe ser reducida.

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apr/ Con información de Nasdaq y Diario Financiero