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La pensión universal no debe incentivar la informalidad: expertos
Se debe cuidar que los beneficiados no reciban más recursos que una persona que cotizó gran parte de su vida laboral.
Para que los esquemas de pensiones no contributivos, como es el caso la pensión universal, sean eficientes, es necesario que se creen medidas que no desincentiven al sector de la formalidad, coincidieron expertos.
Ernesto Acevedo Fernández, economista de la UNAM, expuso que dichos esquemas deben ser muy específicos sobre el tipo de personas al que van dirigidos y cumplir con su principal objetivo, que es disminuir la pobreza de las personas de la tercera edad.
Este esquema debe de estar diseñado únicamente para atender a la población más pobre de la tercera edad, que nunca haya cotizado y que estuvo laborando en el mercado informal por diversas razones .
Actualmente, el Senado de la República mantiene parada la reforma de seguridad social que forma parte de las iniciativas que propuso el Ejecutivo al principio de su administración. Las propuestas son crear un esquema de pensión universal y un seguro de desempleo.
Sin embargo, Acevedo Fernández mencionó que dicha iniciativa está mal enfocada, incluso desde el término universal , ya que este beneficio sólo lo recibirán las personas mayores de 65 años, que nunca hayan cotizado en ningún sistema de seguridad como el IMSS, ISSSTE, o bien, que estén afiliados a algún programa social.
Para las personas que sí están cotizando, la pensión universal les podría ayudar a complementar lo que recibirán en su jubilación; mientras los que nunca han cotizado podrían recibir este beneficio , expresó.
Destacó que para no desincentivar al sector de la formalidad, los recursos que reciban los beneficiados de la pensión no deben ser mayores a los que recibe una persona que laboró en la formalidad.
Presión para las finanzas públicas
Miguel Aguirre, actuario de Valuaciones Actuariales del Norte, mencionó que una de las desventajas de los sistemas de pensiones no contributivos es que son una fuerte presión para las finanzas públicas del país, ya que son solventadas con recursos del Presupuesto de Egresos de la Federación.
El sistema de pensiones resulta en un alto costo para el país, ya que la deuda en este rubro representa alrededor de 120% del Producto Interno Bruto (PIB) y de no mejorar el sistema, seguirá aumentando. Por cada millón de personas afiliadas al IMSS, al país le cuesta dos puntos porcentuales del PIB .
Criticó el hecho de que en México existan más de 100 esquemas de regímenes de pensiones, pues ello está generando que los recursos que se destinan sean altos y poco transparentes, por lo que urgió la creación de un sistema nacional de pensiones.
En este sentido, el especialista de la UNAM coincidió y precisó que también se debería crear la portabilidad, es decir, que una persona pueda cambiar a un esquema de pensión sin afectar sus ahorros.
Se debería hacer un esfuerzo mayor por unificar, homologar y simplificar todos los sistemas de pensiones. En donde al cambiar del sector público al privado pudieras manejar tus recursos sin ningún problema , concluyó.