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Centralización de control de Internet, un riesgo: ICANN
La visión de ICANN es crear un modelo "policéntrico" y multisectorial, donde todos los actores participen en una gobernanza local de Internet pero armonizada globalmente.
Guadalajara.- Aun cuando Estados Unidos acordó "ceder" el control de Internet a la comunidad global, todavía es latente el riesgo de una centralización de la gobernanza de la red de redes, donde una entidad o un reducido grupo de actores definan unilateralmente la administración de los recursos técnicos, o los protocolos de comunicación de la red en el futuro.
Esta advertencia proviene de Fadi Chehadé, Presidente y Director Ejecutivo de la Corporación para la Asignación de Nombres y Números en Internet (ICANN), la entidad responsable de entregar los identificadores únicos de los sitios web y dispositivos informáticos (direcciones IP), así como los parámetros técnicos que hacen funcionar a la Internet.
"La centralización de la gobernanza de Internet no funcionará y de hecho causará más problemas que soluciones, y no permitirá responder a la necesidad de soluciones rápidas. La discusión filosófica global es si abordamos los problemas de gobernanza de Internet a través de un modelo centralizado o mediante un modelo 'policéntrico' y altamente distribuido modelo de gobernanza de Internet", dijo a El Economista durante su visita a México para participar en el Congreso Mundial de Tecnologías de la Información (WCIT), en Guadalajara.
En marzo de este año, Estados Unidos arrancó la transferencia de las funciones técnicas de Internet custodiadas por la Autoridad de Asignación de Números de Internet (IANA), a la comunidad global representada por ICANN.
La transición, que se espera concluya en el 2015, es un hecho histórico pues descentraliza el control de Internet y funciones como la administración del Sistema de Nombres de Dominio (DNS) la base de datos que contiene las listas de nombres y direcciones de todos los dominios de alto nivel y la custodia de los registros de identificadores únicos de nombres de dominio o direcciones IP.
La visión de ICANN es crear un modelo de gobernanza "policéntrico" y multisectorial, donde sociedad civil, academia, gobiernos, empresas y todos los actores participen en una gobernanza local de Internet pero armonizada globalmente.
"Yo hablo de la devolución de la gobernanza, lo que significa el llevarla al nivel más local donde necesita ser resuelta. No deberíamos estar resolviendo problemas de gobernanza que son únicos, por ejemplo, de Egipto, a nivel global. Tenemos que dejar que Egipto lo resuelva. Pero la devolución no quiere decir que dejes el problema a nivel local sin que se mantenga una conexión a nivel global; los problemas deben resolverse a nivel local pero sincronizados en un nivel global y eso es lo que falta ahora", aseguró.
Para entender mejor su visión, Chehadé hace una analogía con la Cruz Roja: es una organización que se rige con principios globales pero actúan a nivel local dependiendo de las necesidades de cada país.
Para el caso de Internet, estos principios base están plasmados en la declaratoria de la reunión NetMundial, celebrada en mayo pasado, en donde se busca un desarrollo que garantice el respeto de los derechos humanos, incluyendo la libertad de expresión y la privacidad; así como para un beneficio social y económico de los países.
El traspaso de las funciones de IANA está en proceso y ICANN ha comenzado la expansión de su presencia geográfica con representaciones regionales en todo el mundo, donde quieren sumar la mayor cantidad de actores que participen en la creación del modelo de gobernanza policéntrica.
"Hacemos políticas para Internet y necesitamos más gente del mundo participando en la mesa para que las políticas no sean elaboradas de, mundo occidental para el resto del mundo. Necesitamos que más gente participe en el proceso y hablo de negocios, gobiernos, sociedad cibernética, activistas, todos deben participar en el proceso y no sólo los gobiernos", afirmó.
Fadi Chehadé aseguró que a raíz de la transición, el equipo de ICANN creció de un grupo de 120 personas, la mayoría radicada en Estados Unidos, a cerca de 350 personas con presencia global. Además dividió las oficinas centrales del organismo en tres sedes: una para América del Norte y Sur en Los Ángeles, una para Europa, Medio Oriente y África en Estambul, y una para Asia y Australia en Singapur.
En Latinoamérica además tiene una representación en Uruguay, comandada por Rodrigo de la Parra, desde donde se busca un mayor acercamiento con los actores regionales, así como el arranque de operaciones locales.
"Entre las actividades que haremos es acercarnos con los proveedores de Internet (ISP) y de conectividad de México y América Latina para que se involucren en la toma de decisiones. Otra cosa que hacemos en la región, antes de cada reunión de ICANN, es reunir a los gobiernos que participan en el Consejo de Desarrollo de Gobierno y hacemos un seminario para que ellos platiquen lo que se va a discutir en la reunión y lleguen más preparados", dijo Rodrigo de la Parra.
El camino hacia la nueva era de Internet se está gestando pero ICANN es optimista de que en el 2015 se habrá concluido la transición para que a partir de entonces, el desarrollo de Internet sea producto de un consenso global, a partir de las inquietudes locales, y sin la existencia de un mando único en la toma de decisiones.
Julio.sanchez@eleconomista.mx