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Brota liquidez, a un año de la reactivación del financiamiento
Conforme se recuperó la actividad productiva y el empleo en el 2010, también comenzó la expansión del crédito. Su comportamiento en los últimos años muestra que existe un rezago en su reactivación de entre seis y nueve meses.
Después de la severa recesión de la economía mexicana en el 2009, el crédito al sector privado tocó fondo en abril del 2010, y desde entonces vive una recuperación generalizada y sostenida, destaca un estudio del Grupo Financiero BBVA Bancomer.
Detalla que durante esta recesión, la contracción más importante se dio en el crédito al consumo y en segundo lugar en el otorgado a las empresas. En lo que se refiere al crédito a la vivienda, éste moderó su ritmo de desarrollo al sostener tasas de crecimiento real anual en terreno positivo.
El Banco de México, por su parte, indica que a partir de la experiencia de la crisis de 1995 se han realizado esfuerzos importantes para fortalecer la regulación y supervisión. En el documento Logros y retos del sistema mexicano precisa que dichos esfuerzos se han traducido en una banca solvente y rentable, y en un sistema financiero más competitivo y eficiente.
El análisis de Bancomer enfatiza que la contracción del crédito que se dio en ese año y en parte del 2010 fue muy moderada, si se compara con lo ocurrido en 1995. Esta baja en la demanda se debió más a condiciones de demanda que a una restricción de la oferta crediticia, hace 16 años la baja se derivó de un colapso en la economía y el sistema financiero.
Existen varias razones que explican este mejor comportamiento del crédito en el 2009 y el 2010 con respecto a otras recesiones. Desde el punto de vista macroeconómico, los avances en la estabilidad de precios evitaron el deterioro del ingreso de las familias y el aumento significativo del costo de financiamiento.
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MÁS EMPLEO REACTIVA CRÉDITO
Es importante destacar que conforme se recuperó la actividad productiva y el empleo en el 2010, también empezó la recuperación del crédito. Conforme el ingreso de las familias se estabiliza, producto de la recuperación del empleo y se empieza a percibir la mejoría en la economía, se logra recuperar una mayor confianza de los consumidores.
BBVA Bancomer anticipa que al reunirse las condiciones anteriores se reactiva nuevamente la demanda de crédito, primero para consumo y después para vivienda. En el caso de las empresas es necesario que mejore el entorno y además que esto sirva para incentivar un uso pleno de la capacidad instalada. Cuando esto ocurre se requiere una mayor inversión y, en consecuencia, una demanda de crédito empresarial.