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Discutirán sobre el diseño como agente de cambio
Del 6 al 8 de mayo, el poder transformador del diseño tendrá su foro.
Del 6 al 8 de mayo, con sedes en el Palacio de Bellas Artes y el Frontón México, las voces de destacados diseñadores, artistas, activistas y comunicadores internacionales convertirán a la Ciudad de México en epicentro de la discusión global sobre la injerencia y capacidad de acción del diseño en la suma de voluntades para la resolución de las distintas problemáticas globales.
Lo anterior se hará posible durante los tres días de actividades de la primera edición del festival What Design Can Do Mexico City (WDCD), mismo que convertirá a la nuestra en la tercera urbe a nivel mundial en ser sede de esta serie de conversaciones, después de Ámsterdam y Sao Paulo.
Este martes, la presentación del proyecto fue encabezada por el empresario y diseñador holandés Richard Van der Laken, cofundador y director creativo del festival a nivel global; Javier López Casarín, presidente de la Fundación Reinventando a México y principal responsable de la presencia del encuentro en la ciudad; Alain Pescador, director general de WDCD Mexico City; Margriet Leemhuis, embajadora de Países Bajos en México; Carlos MacKinlay, secretario de Turismo de la Ciudad de México, y Héctor Esrawe, diseñador, creador de la experiencia del encuentro.
En ella se anunció una lista bastante plural con los oradores ya confirmados que tomarán parte de la conversación. Se dijeron los nombres de la artista y activista rusa Nadya Tolokonnikova, también fundadora de la banda disidente Pussy Riot; de la diseñadora británica Alice Rawsthorn, columnista sobre el tema para The New York Times y Frieze; la reconocida diseñadora de mora senegalesa Selly Raby Kane, revolucionaria de la industria en su continente; el periodista palestino-americano Ahmed Shihab-Eldin, colaborador de Al Jazeera; la diseñadora y cineasta brasileña Marina Willer, socia del reconocido estudio internacional de diseño Pentagram; así como la premiada chef mexicana Elena Reygadas, creadora del restaurante Rosetta, entre otros.
Reposicionar a México
En entrevista con El Economista, Javier López Casarín confirmó que la presencia del festival en México es el resultado de un esfuerzo de dos años y medio por parte de la fundación que preside, en la cual, dijo, se ha priorizado ubicar al país al centro de las discusiones mundiales sobre innovación en torno a los grandes temas de la actualidad.
“En el momento de analizar qué pasaba en el mundo, sobre todo de pensar dónde estaban los circuitos donde está la innovación, donde hay reflexiones a temas tan delicados, como puede ser la equidad, la inclusión, la reflexión sobre las economías, la migración, te das cuenta que México no está ahí y si está, es como espectador, no como actor. Para nosotros era importante, a través de diferentes iniciativas como WDCD, contribuir en lo que nos es posible para que México esté otra vez en estos escenarios y hagamos un programa de eventos importantes donde volvamos a ser un referente”, señaló.
Aseguró que si algo convenció al comité del festival fue la riqueza cultural del país, desde su geografía, su diseño de arte y de textiles, su riqueza culinaria, su crecimiento urbano.
Acotó que su labor fue la de “presentar todo este colectivo que es México, las ventajas que tiene, destacando, por supuesto, que es uno de los principales países en tamaño, en número de población, en propuesta económica, en exportaciones (...). Y les encantó la propuesta y más por la manera de decir que en México somos líderes y tenemos que volver a asumir ese rol para presentarlo al mundo”.
Sobre la selección de ponentes de la primera edición del festival en México dijo que “es muy rica, muy diferente, con la que vamos a atacar ideas como el diseño como concepto, como una política o como un mecanismo para generar inclusión, equidad o responsabilidad”.
Aunado a lo anterior, señaló, que junto con Sao Paulo y Ámsterdam, además de Nueva Delhi y Nairobi, donde WDCD se llevará a cabo en los próximos dos años, México siempre fue visto como pieza clave para el proyecto de posicionamiento global de la iniciativa puesto que nuestro país es visto como una puerta de entrada hacia América Latina.
Un problema, diversas soluciones
Otro interes del festival desde hace varios años y que se replicará en la Ciudad de México es el llamado Programa de Desafíos. Al respecto, Richard Van der Laken dio detalles:
“No nada más somos una organización que hace festivales anuales sino que también tenemos un programa de desafíos, de competencias de diseño en donde convocamos a la comunidad internacional creativa a que propongan soluciones prácticas a problemas reales. Nosotros, como organización, elegimos ese problema y lo ponemos en la mesa para que los diseñadores lo resuelvan. El desafío en la Ciudad de México se enfocó en cómo podemos vincular el gran problema que tenemos con la basura con la energía limpia”.
Anunció que México fue el país de donde llegaron más propuestas, con cerca de 150 entre las cerca de 500 que llegaron de todo el mundo. Confirmó que los ganadores serán decididos por un jurado internacional en Ámsterdam y se anunciarán el próximo 6 de marzo, para después dar seguimiento a los resultados y aplicaciones de los proyectos elegidos. Se priorizarán las propuestas que tengan un potencial para ser comercializadas por su capacidad de impacto ante la crisis planteada por el comité.
Para mayor información sobre el festival visita whatdesigncando.mx