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Picasso bajo la lente de Richard Avedon
El museo Ludwig de Colonia exhibe más de 250 imágenes del pintor malagueño Pablo Picasso tomadas por genios de la fotografía, entre ellos Richard Avedon.
El museo Ludwig de Colonia, en Alemania, exhibe desde el 24 de septiembre y hasta el 15 de enero más de 250 imágenes del pintor malagueño Pablo Picasso tomadas por genios de la fotografía, entre ellos Richard Avedon, muerto el 1 de octubre de 2004.
La muestra 'Conmigo, yo mismo, yo. Retratos fotográficos de Picasso' reúne también imágenes del creador del cubisto tomadas por grandes artistas de la lente como Man Ray, Brassai, Irving Penn, Robert Capa y Henri Cartier-Bresson.
Son 35 fotógrafos los participantes, entre ellos el propio Picasso, de la muestra que el 5 de marzo del año próximo llegará a Málaga, dentro del programa 'Picasso 20 Miradas. Málaga, 20 años bajo la mirada de Picasso'.
Richard Avedon nació el 15 de mayo de 1923 en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos. Se sabe que empezó a practicar la fotografía a la edad de 10 años, siendo su primer modelo el compositor ruso Serguéi Rachmaninov, amigo personal de sus padres.
Estudió este arte en la New School of Social Research, y después comenzó a trabajar para revistas de moda como 'Harper's Bazaar' (1946-1965), 'Vogue' (1966-1990) y el semanario 'The New Yorker'.
En la primera publicación que laboró este artista logro convertirse en jefe de fotografía. Tras esto, Richard Avedon se convirtió en uno de los fotógrafos de moda más influyentes del siglo, por su estilo característico en el juego de contrastes, tanto visuales (negro y blanco) como conceptuales (sofisticación y frivolidad).
En sus trabajos consiguió elevar la fotografía de moda al rango de lo artístico, consiguiendo acabar con el mito de que los modelos debían proyectar indiferencia o sumisión.
En sus fotografías los modelos eran personajes libres y creativos en sus gestos, dentro de escenarios dinámicos y bajo esquemas compositivos previamente decididos.
En la década de 1960 Avedon se reveló como un artista comprometido con las inquietudes sociales de su tiempo. Así, durante 1963 fotografió el Movimiento por los Derechos Civiles en el sur de Estados Unidos, y colaboró en los siguientes años con James Baldwin en el libro 'Nothing personal'.
También, entre 1960 y principios de 1970 este fotógrafo estadounidense realizó reportajes sobre líderes militares y víctimas en la Guerra de Vietnam y manifestaciones anti-guerra en Estados Unidos para el diario 'The New York Times'.
En la temporada de 1989-1990, la noche en que cayó el Muro de Berlín, marchó a Alemania para documentar una ciudad dividida en dos mundos diferentes.
Y así como se destacó en la captura de cuadros sociales, de agrupaciones humanas, también lo hizo en la realización de retratos.
Sus retratos, según califican críticos, son aparentemente sencillos pero profundamente psicológicos.
Así como de personalidades famosas y de desconocidos, que posaban frente a un inmaculado fondo blanco, lo que para los especialistas muestra a un fotógrafo cuidadoso, capaz de plasmar en papel rasgos inesperados de los rostros.
Personas de la envergadura de Truman Capote, Henry Miller, Humphrey Bogart, Marilyn Monroe o Pablo Picasso, fueron algunos de los que pudo retratar este artista, en quienes mostró sus rasgos más humanos e inesperados.
Su método era sencillo pero efectivo, la derrota anímica del contrario fotografiado a través de largas y cansadas sesiones de hasta cuatro horas.
Así desnudo, el retratado e indefenso era capaz de mostrar su personalidad más sincera. Para 1979 comenzó el que habría de convertirse en uno de sus trabajos más importantes.
Por encargo del Museo Amon Carter, de Fort Worth, Texas, Avedon dedicó cinco años a recorrer el oeste de Estados Unidos para documentar a las personas que nunca escribirían la historia de su país.
Así, en la obra titulada 'In the american west 1979-1984', presenta a granjeros, mineros, vagabundos, prostitutas, amas de casa, presos, vaqueros de rodeo o empleados de pequeñas oficinas, entre otros, en fotografías de gran formato tomadas con luz de día, al aire libre y, como siempre, ante un fondo blanco.
Nada hay en ellos del sueño americano o de la tierra prometida, pero son retratos de individuos que han sido observados y artísticamente elevados por la cámara de Avedon mediante una composición sobria, logrando así una considerable fuerza expresiva, dicen críticos.
Al término de este proyecto, Richard Avedon, ya había recorrido un total de 189 poblaciones en 17 estados y había fotografiado a 752 personas utilizando alrededor de 17 mil placas de película, de las que escogió 123 retratos para el referido proyecto.
Dentro de sus motivos fundamentales para realizar su trabajo de fotógrafo, estaban los temas del tiempo, vejez y tensiones. Su arte, se dice, habla del paso del tiempo, su influencia en el ser humano y el camino hacia la muerte.
En el final de su libro 'Portraits' (1976), por ejemplo, culmina con una serie de siete fotografías de su padre envejeciendo gradualmente hasta que parece haberse integrado en la luz que le rodea.
Después de dedicar gran parte de su vida a la fotografía, en 1991 recibió el Premio internacional de la Fundación Hasselblad.
Y 13 años después de ese reconocimiento, el 25 de septiembre de 2004, Avedon sufrió de una hemorragia cerebral en San Antonio, Texas, mientras se encontraba en una sesión fotográfica para un proyecto encargado por la revista 'The New Yorker', el cual se titulaba 'On democracy', y se enfocaba en el proceso electoral de 2004 en Estados Unidos.
Después de seis días murió en la misma ciudad el 1 de octubre de 2004, a consecuencia de complicaciones médicas.