Secretaría de Hacienda mantiene en incertidumbre a becarios del Instituto Mora

Omar, Susana y Daniel son tres de los 78 estudiantes de licenciatura y posgrado de distintas instituciones educativas que fueron beneficiados con la edición 2020 del Programa de Becas del Instituto Mora, el cual, sin embargo, a poco más de un mes de su puesta en marcha, resultó truncado por la disposición de reserva ejercida por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) al Capítulo 4000 "Transferencias, asignaciones, subsidios y otras ayudas", del cual dependían los recursos del mencionado programa de apoyo para la formación de jóvenes investigadores afines a las disciplinas del Instituto Investigaciones Dr. José María Luis Mora.

El 17 de abril, la Dirección Académica del Instituto Mora les notificó sobre el congelamiento de la partida 4000 y, con él, del flujo de recursos para el programa de becas, por lo que la institución debió interrumpir la labor. En algunos de los casos, las afectaciones económicas para sus estudios e, incluso, en la economía de sus familias, ha sido mayúsculo. En unos días se cumplen dos meses sin que estos investigadores en formación perciban la ayuda. Los gastos apremian con el agravante de la emergencia sanitaria.

Omar González vive en Iztapalapa y estudia el segundo semestre de la maestría en Pedagogía por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y en febrero comenzó a ser beneficiado por el programa en la modalidad de Formación en metodologías y técnicas para la investigación a nivel maestría y doctorado, con un monto de poco más de 8,000 pesos mensuales.

"Vivo en casa de mis padres, pero prácticamente soy el que paga los gastos. Ambos tienen más de 70 años y no tienen ingresos. De la beca utilizaba entre 5,000 y 6,000 pesos para esos gastos, además de la transportación y la comida cuando iba a la escuela y al Mora. En la maestría el nivel de excelencia es todavía más rígido. Prácticamente no te da tiempo de hacer otra cosa, algo que tenga que ver con un empleo formal. En esta situación no hay forma de buscar un ingreso y de continuar con mis estudios. A lo mejor sí podría buscarme un trabajo de tiempo completo, pero implicaría despedirme de la maestría. Tengo muchas dudas de continuar porque se conjugó la pandemia y la cancelación de la beca", relata y agrega que ha tenido que buscar satisfacer la urgencia de los gastos corriente con algunos oficios como el de pintor y asistente de electricista.

Susana Ochoa es egresada de la licenciatura en Historia por la máxima casa de estudios. Actualmente elabora una tesis que habla sobre nacionalismos culturales en México y fue beneficiada con una beca en el rubro de Formación en metodologías y técnicas para la investigación a nivel licenciatura, por el que recibía poco más de 4,200 pesos mensuales.

"El apoyo lo utilizaba para las comidas después de salir del instituto. Más tarde volvía a la biblioteca a estudiar. Llegaba a mi casa a las nueve de la noche pero con la tranquilidad de que ya había avanzado en la tesis. El no contar con ese dinero sí me deja vulnerable porque, como historiadores, necesitamos recursos para tener acceso a los archivos. Si quieres copias o reproducciones de los documentos, eso cuesta. De igual manera me he tenido que desplazar para conseguir fuentes. Casi todo el dinero se canalizaba en eso. Cuando termine la contingencia, de no tener la beca, muchos vamos a tener que buscar un empleo para apoyar a nuestras familias, porque la Covid-19 nos ha generado afectaciones económicas. Mi papá es taxista. Su trabajo ha tenido una absoluta baja de ingresos. El apoyo nos permitía concentrarnos en nuestras investigaciones y no tener que trabajar. Eso nos impediría cumplir con todos los requerimientos para acceder  la propia beca", refirió Susana.

Daniel Zavaleta está concluyendo la licenciatura en Relaciones Internacionales, también en la UNAM, y fue becado en el rubro de Formación en metodologías y técnicas para la investigación a nivel licenciatura. Él vive solo en el Estado de México y de la beca pagaba la renta, así como sus alimentos, traslados y otros gastos primarios.

"La beca, además, me servía para financiar la tesis, para comprar libros y artículos que no son públicos. Por otra parte me servía para continuar con el desarrollo de mi formación, así como satisfacer mis necesidades básicas: alimentos, vivienda, traslados a la facultad y al instituto. Con este mes ya serían dos que no recibimos el dinero y que no tenemos el beneficio académico. Ya no tener el ingreso único nos deja en vulnerabilidad dado que, por las circunstancias, encontrar un empleo es sumamente complejo", comparte Daniel.

A principios del año, los 78 becarios del Mora firmaron una serie de 10 pagarés que, comparten, les daban garantía del mantenimiento de la beca hasta noviembre próximo. Para tener acceso a este beneficio, cada uno de los debía cumplir con 12 horas semanales de colaboración con un investigador asignado del Instituto Mora. Otra de las condiciones de la beca es que los beneficiados no pueden desempeñar un empleo, cargo o contrato de prestación de servicios profesionales en la Administración Pública Federal.

Todos ellos se coordinaron para hacer saber su caso ante la opinión pública y las autoridades competentes. Integraron comisiones con tareas específicas para la difusión de su caso, una de las medidas fue la apertura de una cuenta de Twitter (@becariosmora20) en la que actualizan su situación.

El 2 de junio, a través de esa cuenta, respondieron un mensaje en el cual el secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera, garantizaba recursos suficientes para ciencia, educación y cultura, independientemente del mecanismo presupuestal a través del cual operen.

"Pues nosotros somos 78 becarios que nos cancelaron nuestra beca de investigación como resultado del congelamiento de la partida 4000. El mes pasado ya no recibimos nuestra beca, lo cual nos deja en un contexto de vulnerabilidad", fue la réplica de los afectados. Y Herrera respondió: "Gracias por su mensaje. Revisamos este tema inmediatamente".

Acto seguido, fueron contactados por Julieta Brambila, directora de Comunicación y vocera de la SHCP, quien les solicitó un reporte por escrito de su situación, mismo que hicieron llegar un día más tarde. Este miércoles los becarios del Mora pudieron comunicarse de nueva cuenta con Brambila para enterarse sobre alguna actualización de su caso. La funcionaria les comunicó que no hay novedad hasta el momento pero dejó la comunicación abierta.

"Buscamos que se nos dé una respuesta, ya sea positiva o negativa. Pero seguimos en la incertidumbre. La beca era un ingreso único para todos nosotros y por eso estamos haciendo presión. Hay quienes son estudiantes foráneos y con eso podían sustentar su permanencia en la Ciudad de México. Hay varios que ya están endeudados", declaró Daniel Zavala.

"Está en riesgo nuestra formación como estudiantes. El que se quiten los apoyos incide en que haya más deserción y abandono. Están desdeñando el apoyo a la educación. Hemos hablado que sería importante exigir que el Mora también se pronuncia al respecto", argumentó Omar González.

"Hay compañeros que están un una situación más precaria, tienen que pagar renta, algunos de sus familiares se quedaron sin empleo. Es incongruente un gobierno que apela a la juventud, pero solamente a través de cierto tipo de programas. El de Jóvenes construyendo el futuro ha tenido prioridad en el contexto de la pandemia, pero nosotros, desde la investigación, hemos sido relegados", complementó Susana Ochoa.

Mientras tanto, las necesidades básicas y sus gastos se acumulan, y crece la incertidumbre.

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De acuerdo con el Clasificador por Objeto del Gasto para la Administración Pública Federal, el Capítulo 4000 "Transferencias, asignaciones, subsidios y otras ayudas" regula las asignaciones "destinadas en forma directa o indirecta a los sectores público, privado y externo, organismos y empresas paraestatales y apoyos como parte de su política económica y social, de acuerdo con las estrategias y prioridades de desarrollo para el sostenimiento y desempeño de sus actividades".

En el subapartado 43901 "Subsidios para capacitación y becas", estipula las "asignaciones destinadas al sostenimiento o ayuda de estudiantes y personas que realicen estudios e investigaciones en planteles e instituciones educativas y de investigación del país o del extranjero, así como programas de capacitación para el empleo (...)".