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Tristeza decembrina: ¿Cómo sobrevivir a los sube y baja emocionales esta temporada?
Quienes pueden padecerla con más facilidad son quienes tienen alguna enfermedad psicológica o trastorno bipolar, además de niños, adolescentes, mujeres y adultos mayores.
En esta temporada de invierno, es común que muchas personas tiendan a sentir un “bajón emocional”, lo cual se conoce como depresión estacional o trastorno afectivo estacional, una condición que, de acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), puede sentirse sin importar la condición social o económica con la que se cuenta.
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Datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) indican que entre el 4 y 8 % de la población general sufre este padecimiento, del cual se marca más entren las mujeres entre los 25 y 30 años, presentándose en una proporción de cuatro de ellas por un hombre.
Asimismo, quienes cuentan con más posibilidad de padecerla son quienes tienen alguna enfermedad psicológica o trastorno bipolar, además de niños, adolescentes, mujeres y adultos mayores; quienes viven solos, aislados o tienen inestabilidad emocional.
El estudio “Treatment measures for seasonal affective disorder: A network meta-analysis”, difundido en Journal of Affective y hecho por los científicos del Jingzhou Mental Health Center y del Institute of Mental Health of Yangtze University, señala que la altitud en la que vivimos también tiene una correlación importante con este padecimiento: “Es un desorden del estado de ánimo con una prevalencia que varía entre el 1.5 y el 10 por ciento. Las latitudes más altas tienden a tener tasas mayores, pero las poblaciones de todo el orbe pueden verse afectadas en cierta medida por dicho trastorno”.
Por su parte, Gerardo Mora Gutiérrez, profesor e investigador de la Coordinación de Psicología Clínica y de la Salud de la Facultad de Psicología (FP), considera interesante que este tipo de manifestaciones depresivas se presenten específicamente en invierno, y que a las personas con depresión se les agudicen y recalcó la necesidad de atender a los pacientes que ya hayan tenido depresión.
“La estadística nos dice que hay una baja tasa de incidencia en personas que no han tenido episodios depresivos previamente, pero podríamos pensar que hay momentos, por eso su nombre situacional o estacional. Lo que nos refiere es que existen personas que están bien la mayor parte del año y, justamente en esta temporada, independientemente de que no hayan tenido alguna manifestación depresiva previa, puedan presentarla”, mencionó.
La estadística nos dice que hay una baja tasa de incidencia en personas que no han tenido episodios depresivos previamente, pero podríamos pensar que hay momentos, por eso su nombre situacional o estacional. Lo que nos refiere es que existen personas que están bien la mayor parte del año y, justamente en esta temporada, independientemente de que no hayan tenido alguna manifestación depresiva previa, puedan presentarla”, mencionó.
Identifica la depresión estacional
De acuerdo con el IMSS, entre los síntomas más comunes de la depresión estacional se encuentran:
- Cansancio sin causa aparente.
- Apatía.
- Desgano.
- Pérdida de energía.
- Irritabilidad.
- Pensamientos negativos y derrotistas.
- Insomnio.
- Sueño en exceso o mucho sueño durante el día.
- Falta o aumento del apetito.
Mora Gutiérrez indicó que debemos tener en cuenta el estado de nuestra salud en los últimos años, así como si se tienen episodios recurrentes: “Una señal muy importante es por lo menos haber tenido dos episodios previos en temporadas anteriores. ¿Esto qué quiere decir? Que para diagnosticar un trastorno depresivo estacional tiene que haber por lo menos tres episodios. (...) Si de pronto notamos que se da por un momento o ante una situación determinada del año, por ejemplo, no se consideraría como tal, porque no tendríamos la evidencia que ampara que antes un individuo pudo haber sufrido depresión estacional, y que haya sido transitorio”.
También subrayó la importancia de distinguir entre los sentimientos pasajeros y un estado depresivo, ya que la depresión no es tristeza; además de que hay quienes no toleran los estímulos de la temporada, como son las luces navideñas. El especialista explicó que “es muy común en afecciones mentales que la gente deje de dormir o empiece a hacerlo más. O cambios en la apetencia: puede haber una disminución o aumento del hambre”.
Incluso falta el deseo de implicarse en actividades de esta temporada, como reuniones con familiares y amigos; “hay una parte abúlica que hace que la gente vaya poco a poco y progresivamente aislándose o boicoteando inclusive elementos muy característicos de esta temporada”, refiere.
¿Cómo debes actuar?
Si tienes alguno de los síntomas antes mencionados, acude con un especialista para que te dé un diagnóstico que indique la afectación que se tiene. Aunque Gerardo Mora también sugiere, primero, identificar el momento en que te sientes mal, y segundo, realizar un diálogo contigo mismo:
"Si nos damos cuenta de que el pensamiento o la capacidad de contacto con uno mismo están bloqueados, entonces tenemos que buscar un interlocutor, que no necesariamente tiene que ser un profesional; podría ser alguien en las redes de apoyo que son parte de nuestra vida: familia, amigos o gente cercana, inclusive compañeros de trabajo”.
Si nos damos cuenta de que el pensamiento o la capacidad de contacto con uno mismo están bloqueados, entonces tenemos que buscar un interlocutor, que no necesariamente tiene que ser un profesional; podría ser alguien en las redes de apoyo que son parte de nuestra vida: familia, amigos o gente cercana, inclusive compañeros de trabajo”.
Asimismo, tanto Mora Gutiérrez como el IMSS sugieren aprovechar la fototerapia y aumentar la actividad física con breves caminatas, ya que “como los días son más cortos y las noches más largas, la gente no recibe la luz solar necesaria para poder activar su ciclo circadiano”, especificó el investigador.
Recalcó que no necesariamente toda persona solitaria pase por un trastorno emocional y en esto radica la importancia de tener un diagnóstico preciso, al referir que “una cosa es ser depresivo por personalidad y otra por situación o estado temporal. Hay quienes son aislados, que tienen rasgos de introversión, que son más tímidos o retraídos. O simple y llanamente, por su propia paz mental, deciden estar solos”.