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Capital Humano

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Con el apagón, ¿qué cosas suceden… en el home office?

Las desconexiones masivas de energía eléctrica han puesto un énfasis en la importancia de contar con protocolos y políticas internas para atender estos casos, coinciden especialistas consultadas.

Foto: Shutterstock

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Los cortes de luz siempre han sido uno de los riesgos del home office, pero en las últimas semanas, los apagones ‘masivos’ por una saturación en el Sistema Eléctrico Nacional han generado más inquietudes en torno al trabajo desde casa. ¿Se considera tiempo de la jornada laboral mientras no hay electricidad? ¿Te pueden exigir retornar a la oficina después de esta situación? Éstas son sólo algunas dudas en torno a esto.

Las respuestas a estas inquietudes dependen de diversos factores: lo que se establezca en la política de teletrabajo, el tipo de actividad que se realiza a distancia, si el pago es por hora o por jornada o el tiempo que dura la desconexión. Esos son sólo algunos elementos para tomar en cuenta, expone Jimena Sánchez, socia fundadora de Employment Legal Aid.

Lo que es un hecho, es que las empresas deben contar en su política de teletrabajo con el procedimiento y las reglas cuando las personas pierden la conexión eléctrica y el acceso a internet. “Tenemos que darle claridad a los empleados sobre qué se debe hacer”, agrega la especialista.

Éstos son algunos escenarios legales del home office frente a los apagones de luz:

» Salario

A decir de la especialista, cuando el corte de energía no permite la realización de las actividades laborales asignadas, existe la posibilidad de que no se pague el día de trabajo o las horas, si el pago es en función del tiempo laborado.

“Depende de las actividades que desarrolles. Por ejemplo, nosotros los abogados que litigamos poco, prácticamente todo el día tenemos que estar en la computadora atendiendo correos, videoconferencias y llamadas con los clientes, eso significa que debes tener luz e internet en toda tu jornada de trabajo, y sino la tienes, la prestación del servicio es imposible de realizar, y si no hay una prestación del trabajo, no hay una obligación de pago del salario”, explica Jimena Sánchez.

Sin embargo, en contrataciones por jornada completa, descontar el tiempo de desconexión no es posible; en estos casos, el pago del salario está sujeto a la acreditación de entregables y métricas de desempeño.

» Retorno a la oficina

Es un escenario muy probable, en un contexto de apagones de luz, las empresas pueden solicitar a sus empleados laborar desde la oficina durante el período que no hay conexión eléctrica, opina la especialista.

Otra alternativa es que desde la política de teletrabajo, las compañías consideren domicilios alternos -verificados con la NOM-037- para que los trabajadores laboren en casos donde no sea posible tener luz e internet, dice Jimena Sánchez.

» Aviso al jefe 

Uno de los procedimientos más comunes en las políticas de teletrabajo, afirma la especialista, es la obligación de los trabajadores de comunicar directamente al jefe inmediato cuando haya un apagón de luz. “Esto es importante para que la empresa tenga evidencia de a partir de cuándo tienes intermitencia en el servicio”.

En este sentido, agrega Jimena Sánchez, las empresas deben ofrecer diversos canales de comunicación con los empleadores en teletrabajo para informar sobre estos casos.

Prevención, la clave

Para Alejandra Toscano, directora general de DNE Consulting, los apagones masivos que se han reportado en el país confirman la importancia de que las empresas cuenten con protocolos para ayudar a las personas a contar con un plan B. “Más allá de lo reactivo, tenemos que ser proactivos”.

Un buen protocolo puede incluir pilas adicionales con carga, esto permite que las personas cuenten con más tiempo de energía para sus equipos de cómputo. Esta medida no tiene que ser para todos los teletrabajadores, sólo para los puestos clave que no pueden quedarse sin conexión. “Nos lleva a hacer un análisis de qué equipos sí o sí deben estar protegidos”.

“Un buen procedimiento para los colaboradores, es que tengan los equipos con un porcentaje mínimo de batería, como los coches, no hay que tener menos de un cuarto de gasolina. Por ejemplo, cuando la computadora tenga 50% de batería, hay que cargarla”, sugiere la especialista.

Una práctica que se puede incluir en estas reglas, indica la especialista, es que todos los archivos enviados por correo se descarguen automáticamente para poder visualizarlos sin conexión a internet. “Descargarlo cuando la necesitamos, eleva el riesgo de no contar con ella cunado se requiere porque en caso de desconexión de luz, la información está en un correo que requiere internet para descargarlo”.

“Necesitamos crear protocolos y no dejar todo en mejores prácticas. Hay puestos que deberían tener un plan B en caso de contingencia, cuando tenemos reglas sabemos cómo actuar, y hoy en día no hay nadie que lo tenga, aún con la NOM-037, porque no se dimensionaba lo que se viviría con el calor y los apagones”, señala Alejandra Toscano.

En los últimos días, el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) ha declarado en diversas ocasiones en Estado Operativo de Alerta y de Emergencia al Sistema Interconectado Nacional, esto por un incremento en la demanda de energía y reservas operativas bajas.

Este escenario, coinciden las especialistas, es un recordatorio de que la implementación del home office aún tiene retos y las compañías deben reforzar las políticas internas para dar claridad a sus empleados en estas situaciones.

Periodista especializado en políticas laborales, indicadores de empleo, futuro del trabajo, desarrollo de carrera, recursos humanos y salud laboral. Actualmente es editor de Capital Humano.

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