El inglés que honra el seno del Tottenham

Harry Kane obtuvo la herencia goleadora de Alan Shearer y Teddy Sheringham. Los delanteros que dominaron los inicios de la Premier League, cuando el torneo inglés todavía no era el mapamundi del futbol.

Cuando Harry nació, Teddy se convertía en el campeón de goleo del torneo inglés y durante ocho años el título fue para un nativo de la isla, pero al momento de la apertura al talento extranjero, pasaron 15 años sin que un atacante inglés se adueñara del gol, hasta que Kane, el niño que llegó a los 11 años a la academia de Tottenham, resistió el difícil camino de la apertura y globalización del balompié británico.

“Los reveses así siempre te muestran el tipo de persona que eres”, expresó Harry en el final de la temporada pasada, cuando recordó que se perdió 13 partidos en el curso, ocho de ellos en la Premier League, pero aún con la ausencia, se coronó como campeón de goleo por segundo año consecutivo.

Kane no sólo se convirtió en el primer campeón de goleo inglés en 15 años, sino también en la nueva figura del futbol de la isla que lo ha llevado a la nominación como candidato a ganar el balón de oro en el 2017, el único futbolista inglés con dicha distinción en 12 años, desde que Frank Lampard y Steven Gerrard compitieron por el galardón.

“La perseverancia lo ha dejado en su sitio”, mencionó Jesús Pérez, auxiliar técnico de Mauricio Pochettino en Tottenham.

Como canterano en los Spurs, Kane batalló con las oportunidades de juego, lo que hizo que tuviera que salir a préstamo en cuatro ocasiones. En sus aventuras con Leyton Orient, Millwall, Norwich y Leicester, incluso con las esporádicas apariciones en las convocatorias en Tottenham.

A los 20 años, cuando Tottenham negociaba un préstamo más para no frenar su rendimiento, Kane pidió no salir, peleó por un puesto y para la temporada 2014-2015 comenzó como suplente en los primeros cuatro partidos, pero terminó con 21 goles, sólo superado por Sergio Agüero, y como el mejor anotador inglés.

Han sido 105 goles en las últimas cuatro temporadas, que lo han colocado como candidato a la bota de oro en los dos años anteriores y aunque su futuro parece atado hasta el 2022 con Tottenham, con 24 años y una valoración de 60 millones de euros, equipos como Chelsea, Real Madrid y Manchester United ya mueven el mercado de fichajes con sus ofertas.

Harry, quien no ha ganado títulos y con un equipo plagado de juventud, con un promedio de 26 años, se presenta en la Champions League como un animador, en espera de crecer junto a sus compañeros o valorar las ofertas que lo pondrían en las puertas de los títulos y contratos millonarios.