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Ceden presiones en las cadenas de suministro mundiales en mayo
La disminución se debió a la menor contribución de los retrasos en Reino Unido y los plazos de entrega de Taiwán.
Las presiones de la cadena de suministro volvieron a enfriarse en mayo, según mostraron los datos de la Reserva Federal (Fed) de Nueva York, en una evolución que suavizó aún más lo que había sido uno de los factores clave que habían contribuido a impulsar las crecientes presiones inflacioniarias en torno al trabajo.
La Fed de Nueva York informó ayer que su último Índice Global de Presión de la Cadena de Suministro se situó en -1.71 puntos frente a -1.35 revisado de abril. Según el informe, las presiones sobre la cadena de suministro se situaron por debajo de la media en todas las regiones del mundo consideradas en el índice.
El banco vinculó la reducción de la presión en mayo a la menor contribución de los retrasos en Reino Unido y los plazos de entrega de Taiwán. Sin embargo, los plazos de entrega y la cartera de pedidos de la zona euro presionaron al alza el índice.
Tras alcanzar un máximo de 4.31 puntos en diciembre del 2021, el índice de la Fed de Nueva York no ha dejado de retroceder a medida que se han ido resolviendo los problemas de la cadena de suministro generados por la pandemia de Covid-19. El índice entró en territorio negativo en febrero, señal de que las presiones sobre la cadena de suministro se resolvieron en gran medida, y desde entonces no ha dejado de bajar.
Las presiones de la cadena de suministro fueron un factor clave en el aumento de la inflación, lo que a su vez impulsó a bancos centrales a realizar agresivos aumentos de las tasas de interés para reconducir las presiones sobre los precios.
Las presiones inflacionarias han disminuido lo suficiente en los últimos meses como para abrir la puerta a que el banco central estadounidense haga una pausa en el ajuste monetario en su reunión de política monetaria de la próxima semana, aunque esa pausa puede no poner fin a la campaña de endurecimiento, ya que los factores de demanda mantienen las presiones sobre la subyacente mucho más alta de lo que buscan los banqueros centrales.