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Inflación y confianza del consumidor pega al clima de negocios en México
Se teme sobre la capacidad que tendrá la economía de sostener el crecimiento en los próximos trimestres.
La pérdida del poder adquisitivo en los hogares mexicanos, producto de la mayor inflación, así como el volátil sentimiento del consumidor y el debilitamiento observado en la expansión del crédito están endureciendo un clima de negocios cada vez menos favorable para México, advierte desde Washington el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF).
En un análisis, consignan que estas condiciones combinadas con la volatilidad relativa a las elecciones presidenciales del 2018 tendrán un efecto aún más adverso que el previsto para la actividad económica del año entrante .
En la nota, desarrollada por el subdirector de economistas en el Departamento de América Latina del IIF, Martín Castellano, anticipan que los problemas por el comercio exterior son un factor de riesgo para las decisiones de inversión productiva y en consecuencia para el desempeño de la economía.
En la nota, el IIF fija en 1.2% su expectativa para el Producto Interno Bruto (PIB) de México en el 2018,pero detallan que los riesgos indican un PIB a la baja.
Con ello se convierten en la expectativa más pesimista sobre el desempeño de la economía para el año entrante, pese al mejor ánimo del mercado para México en el 2018 observado en los últimos dos meses.
En el reporte del IIF, explican que pese a la expansión sólida observada en la economía en el primer trimestre del año, de 2.7%, hay un importante debate sobre la capacidad que tendrá la economía mexicana de sostener el crecimiento en los próximos trimestres . El debate, tiene que ver con el efecto en la confianza del consumidor, que tendrá la renegociación del Tratado de Libre Comercio para América del Norte y las elecciones del año entrante.
Inflación, mina poder adquisitivo
El documento del IIF precisa que la pérdida del poder de compra que han tenido los mexicanos, tiene que ver con la consistente inflación que se ha mantenido por arriba del objetivo de 3%, con +/-1 punto porcentual en el transcurso del año.
Con este análisis, el IIF refiere que lo dicho a principios del mes por la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena, quien advirtió que si la inflación seguía creciendo, podría alimentarse un clima adverso con alto impacto en las personas que viven con menos recursos.
En una conferencia desde la sede de la Comisión, la funcionaria argumentó que la mejora al salario mínimo había compensado parcialmente el impacto del aumento en los precios de combustibles, pero acotó que no se mantendrá por un tiempo indefinido si la inflación sigue creciendo.
A la primera quincena de junio, el índice de precios de la canasta básica a tasa anual se ubicó en 8.61% con un registro que aumentó 0.10% en las primeras dos semanas del mes, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
De acuerdo con la funcionaria de la CEPAL, la canasta alimentaria es un indicador relevante para identificar el efecto de la inflación en la población de menos recursos.