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Ventas pendientes de viviendas en EU, en su nivel más alto en 21 meses
La Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios informó que su Índice de Ventas Pendientes de Viviendas, basado en los contratos firmados, subió un 2.2% el mes pasado a 79.0, desde 77.3 en octubre.
Los contratos para comprar viviendas de segunda mano en Estados Unidos aumentaron más de lo esperado en noviembre, sumando un cuarto mes consecutivo de alzas, ya que los compradores se centraron en aprovechar la mejora del inventario a pesar de las tasas hipotecarias obstinadamente altas.
La Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por su sigla en inglés) dijo el lunes que su Índice de Ventas Pendientes de Viviendas, basado en los contratos firmados, subió 2.2% el mes pasado a 79.0 -el nivel más alto desde febrero del 2023- desde 77.3 en octubre.
Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que los contratos, que se convierten en ventas después de uno o dos meses, subirían un 0.9% tras aumentar 1.8% en octubre.
Las ventas de viviendas pendientes aumentaron 6.9% respecto al año anterior.
El aumento en la firma de contratos en noviembre coincidió con un segundo aumento consecutivo en la compra de viviendas existentes el mes pasado, informó previamente NAR. Ese informe anterior mostraba que el inventario de viviendas en venta en noviembre había aumentado casi 18% con respecto al año anterior.
“Los consumidores parecen haber recalibrado sus expectativas respecto a las tasas hipotecarias y están aprovechando el mayor inventario disponible”, declaró Lawrence Yun, economista jefe de la NAR.
“Las tasas hipotecarias han estado de media por encima de 6% durante los últimos 24 meses. Los compradores ya no esperan que bajen sustancialmente. Además, los compradores están en mejor posición para negociar, ya que el mercado está dejando de ser un mercado de vendedores”, apuntó.
De hecho, la tasa de las populares hipotecas a tasa fija a 30 años ha subido en los dos últimos meses hasta alcanzar el nivel más alto desde julio, 6.85%, según Freddie Mac, contrarrestando esencialmente los recortes de las tasas de interés aplicados desde septiembre por la Reserva Federal.
El bono del Tesoro estadounidense a 10 años, que es el que más influye a la hora de determinar las tasas de la mayoría de los préstamos hipotecarios, ha subido aproximadamente un punto porcentual desde septiembre.
Esto ha ocurrido a medida que los inversionistas del mercado de bonos se han preocupado por cómo las políticas favorecidas por el presidente electo Donald Trump -como aranceles, recortes de impuestos y medidas represivas de inmigración- podrían alimentar una mayor inflación.
