Cargill refrenda su compromiso de inversiones en México

El presidente de la multinacional Cargill, Marcelo Martins, aseguró que la empresa de origen estadounidense mantiene sus planes de inversión en México.

"La incertidumbre del TLCAN no ha detenido inversiones. Estamos pendiente y seguimos muy comprometidos con México. Nuestros planes siguen ahí y bastante fuertes y no ha cambiado nada", aseguró el directivo en el marco de la entrega del premio Cargill-CIMMYT a la Seguridad Alimentaria y la Sustentabilidad.

Entrevistado al finalizar la ceremonia de premiación, que se llevó a cabo en el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) en México, dijo que si bien existen algunos temas que abordar para la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la relación de la empresa con México continúa como lo planeado.

Señaló que para un mejor funcionamiento del libre comercio entre ambos países se deben modificar algunos temas de reglamentación, barreras fitosanitarias, incorporar toda la gestión de la regularización, de Internet, que no está en el tratado y hay muchas otros temas en donde hay oportunidades de mejora.

"Esperemos que se fortalezca el tratado y que podamos seguir creciendo como región, no como país individual. Hay preocupación, mas sigo confiado en el proceso de negociación que será racional y eso es muy claro para las dos economías", dijo el directivo de la firma proveedora de productos y servicios alimenticios, de agricultura, financieros e industriales.

Durante la ceremonia de premiación, recordó los desafíos que encara la seguridad alimentaria en el país y destacó en este sentido la vocación de los participantes en el concurso, cuyos proyectos finalistas incluyen trabajos de promoción de tecnologías que incrementan la sustentabilidad del campo, aumentan la producción de maíz y reducen las pérdidas en las cosechas.

"En Cargill sabemos que el sistema alimentario mundial enfrentará el reto para nutrir a una población que superará los nueve mil millones de personas en los años 50, por lo que el aumento de la capacidad de productores y agricultores para incrementar la oferta en el mundo también tiene objetivos sociales, ya que al aumentar su producción mejoran sus ingresos, fortalecen las cadenas económicas y con ello la calidad de vida de muchas personas".

En este esfuerzo global, añadió, México puede cumplir un importante papel, por lo que es crucial hacer un mejor aprovechamiento para los recursos y tierras disponibles, así como fortalecer la vocación productiva de cada región del país.