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Cuba y la UE pactan bases de relaciones comerciales
Si bien el nuevo pacto no llega a ser un acuerdo comercial en sí mismo, sí sienta las bases para los intercambios conforme a lo estipulado por la Organización Mundial del Comercio.
Cuba y la Unión Europea (UE) normalizarán sus relaciones el 1 de noviembre, con la entrada en vigor del primer acuerdo de cooperación entre ambos en un contexto de tensión entre Washington y La Habana.
“El Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación entre la UE y Cuba entrará en vigor provisionalmente el 1 de noviembre”, indicó a la AFP una portavoz de la Comisión Europea.
Cuba se convirtió en diciembre del 2016 en el último país latinoamericano en firmar un acuerdo de este tipo con el bloque, cuyas relaciones se regían hasta entonces por la denominada Posición Común de 1996. Esa posición, que Cuba consideraba “injerencista”, vinculaba la cooperación europea a “mejoras de los derechos humanos”, una cuestión que representó uno de los escollos durante la negociación del acuerdo.
Ambas partes lo solventaron con la inclusión en el texto, negociado durante casi dos años desde abril del 2014, de un diálogo sobre derechos humanos, que ya celebró incluso varias ediciones. Y aunque el acuerdo contempla la posibilidad de suspenderlo en caso de violar los compromisos en esta materia, varios disidentes habían pedido a la Eurocámara que no lo ratificara, en vano.
El pacto sienta las bases de sus relaciones comerciales conforme a lo estipulado en los Acuerdos de la Organización Mundial del Comercio (OMC), aunque, como lo señaló en julio la ponente del acuerdo en la Eurocámara, Elena Valenciano, “no llega a ser un acuerdo comercial” en sí mismo.
Además, los 28, cuyas empresas no quieren perder el tren de la tímida apertura cubana, y La Habana se comprometen a elaborar una actuación común en contextos multilaterales y a trabajar con base en el “respeto mutuo”.
La decisión de aplicar el acuerdo, publicada el sábado en el Diario Oficial de la UE y comunicada esta semana a los países del bloque, llega en el mayor momento de crisis entre la isla y Estados Unidos desde que ambos restablecieran sus lazos diplomáticos en el 2015.
Tras el endurecimiento impuesto por el presidente Donald Trump desde su llegada en enero a la Casa Blanca, Washington decidió a fines de septiembre suspender el otorgamiento de visas en Cuba.
En respuesta al caso de los “ataques a la salud” padecidos por diplomáticos estadounidenses, la diplomacia de Estados Unidos decidió también expulsar del país a 15 funcionarios cubanos.
Sólo los ámbitos que son competencia del ejecutivo comunitario, como los aspectos comerciales o la cooperación, se pondrán en marcha a partir del 1 de noviembre.
La lucha contra el terrorismo o el desarme, que en Europa son competencia de los gobiernos nacionales, se aplicarán cuando los parlamentos de los países del bloque ratifiquen el pacto. Este largo y complejo proceso hacia la aplicación total del acuerdo puede tomar años en la UE.