¡Cumplimos la misión! Tiscareño afirma que en el AICM se acabó la inseguridad, pero aún hay pendientes

El director del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), Vicealmirante Piloto Aviador Retirado Carlos Velázquez Tiscareño, dejará el cargo la tarde del 16 de marzo. Asegura que se irá con la tranquilidad de haber cumplido la misión que se le encomendó en julio del 2022: poner orden en un lugar que parecía más un tianguis que la principal terminal aérea del país.

Asegura que no quedará “nada grave pendiente”, aunque reconoce que sí hay procesos sin concluir debido a los tiempos legales que implican, entre ellos Sitio 300 (taxis), el edificio y mobiliario de Interjet, la recuperación de locales comerciales que no han pagada y un “estricto ordenamiento” de las casas de cambio.

También dejará los argumentos para optar por la construcción de una nueva terminal 1 en el mediano plazo.

“Cuando llegamos había muchos retos en todas las áreas: delincuencia, demoras, cancelaciones, aglomeraciones, vuelos ilegales, delincuencia organizada, trata de personas, lavado de dinero, inmigrantes ilegales muchos, problemas de drogas en aduana... Ahora tenemos un aeropuerto seguro y operando adecuadamente”, refiere.

En su periodo, Tiscareño (como gusta que le llamen) encabezó diversas acciones estratégicas para el buen funcionamiento de la terminal: a partir de abril del 2023 se prohibieron los despegues de las aerolíneas que no contaban con un horario (slot) autorizado, en septiembre del mismo año las empresas dedicadas al negocio de carga dejaron de operar en sus instalaciones, desde octubre está sectorizado a la Secretaría de Marina y en enero pasado inició una nueva reducción temporal de operaciones (de 52 a 43 por hora).

Previo a su llegada, se enviaron 1,500 marinos para velar por la seguridad de la terminal.

El jueves reciente, luego de participar en una reunión extraordinaria del Comité de Operaciones y Horarios del AICM, el director hizo ante medios de comunicación una suerte de reporte general de actividades. Dicho encuentro lo inició diciendo que hay ciclos que se cierran y eso le ocurre porque su Mando lo convocó a nuevo reto que en tiempo y forma se comunicará (se sabe que será director de la Administración del Sistema Portuario Nacional de Veracruz).

“Se considera que la misión principal que me fue encomendada se cumplió y que el aeropuerto está navegando en una situación diferente de cuando se recibió hace casi dos años. Consideran que ya puede haber aquí un relevo y eso pasará”, argumenta el marino en retiro.

Su lugar será ocupado por el actual encargado de Operaciones de la terminal, el Contralmirante José Ramón Rivera Parga, quien será el quinto director de la actual administración federal.

—¿Cómo queda la relación con las aerolíneas, nacionales e internacionales?, se le preguntó al Vicealmirante.

—Tengo una magnífica relación. Siempre es difícil generar una buena relación, pero se tiene que ver por las dos partes que ésta sea productiva. Somos autoridad. Yo les dije a las cabezas de las empresas: vamos a trabajar como se debe trabajar. Los dos tenemos que estar de acuerdo, tú cumplas con mi normatividad y reglas para que puedas hacer buen negocio, porque no se puede que tengas vuelos ilegales, que satures salas de espera, que tengas una gran cantidad de demoras o cancelaciones. Ahora ya no hay demoras y si hay son justificadas, la gran cantidad es por vuelos de llegada y eso genera una cascada. Vamos, no es fácil, pero vamos juntos.

Hay recursos suficientes

Con su disposición habitual para hablar de los temas del aeropuerto, el director reitera que su gestión no enfrenta la falta de recursos, por ello las tareas de mantenimiento se cumplen día a día.

Para el presente año les asignaron en el presupuesto de egresos de la federación 1,500 millones de pesos, a lo que suma 975 millones de pesos que le entregaron por ingresos excedentes del cobro de la tarifa de uso de aeropuerto (TUA) del 2023 (los recursos que están comprometidos corresponden a 40 millones de pasajeros y el año pasado hubo poco más 48.5 millones) y ahora tiene la promesa de que al iniciar el 2025 recibirá un nuevo excedente por TUA de 4,500 millones de pesos.

Además, han recuperado adeudos que había con diversos locatarios.

“El dinero no es un tema que nos complique, pero tampoco podemos estar metiendo dinero en una infraestructura que ya no da. Se creó ya la conciencia de que debe haber una nueva terminal 1 y en el próximo sexenio algo se tiene que hacer al respecto. Nosotros cambiamos ahí escaleras eléctricas y elevadores, pusimos 63 equipos de rayos equis, todos los body scan se están cambiando (a finales de marzo terminan de instalar) y eso los pasajeros lo sienten”, detalla el funcionario.

En el caso de la terminal 2, asegura que los trabajos de recimentación que estuvieron a cargo del Gobierno de la Ciudad de México implican unos 700 millones de pesos y ya terminaron, aunque no habrá una ceremonia al respecto por la veda electoral.

Los pendientes en voz propia:

Sitio 300

Es un problema que no se puede resolver de inmediato porque es una empresa con muchos años y muchos problemas intergremiales. Tiene problemas de pago con nosotros por unos 60 millones de pesos. Fue la única organización que no quiso pagar. Desde que llegamos les hicimos un programa solidario a todos, entendimos que estaban afectados por la pandemia del Covid-19. Ya recuperamos un terreno que subarrendaban. Hemos clausurado puntos de venta, los tenemos demandados y solicitamos un juicio para su quiebra.

Casas de cambio

Se han registrado problemas de asaltos. Estamos interviniendo en el caso varias autoridades. Nosotros no tenemos jurisdicción ni un metro afuera de la zona federal y no podemos seguir a nadie fuera de nuestro límite, pero sí damos información que tenemos a la policía.

El proceso de reacomodo que buscamos no es rápido porque hay contratos que respetar. En mi opinión no tenemos que ser una área de muchos centros cambiarios. El interés del aeropuerto debe ser para los viajeros que visitan y necesitan cambiar. Son muchas casas de cambio, eso ha facilitado los robos.

Interjet

El edificio de la terminal 1 está en instalaciones del aeropuerto y los bienes del Estado no se pueden embargar por un proceso de quiebra, por tanto, son nuestros, pero hay un juicio, hay un síndico que trabaja a favor de cómo repartir los bienes entre los afectados. Estamos tratando de recuperar el espacio, es un edificio inteligente y el mobiliario está integrado y es muy caro. Buscamos comprar el mobiliario a los sindicatos porque de otra forma, si se desacopla no sirve para nada.

Aeromar

Todas las aeronaves de Aeromar que están ahí eran de empresas que se las arrendaban y estamos viendo que se las lleven. Esperamos que el síndico defina qué bienes pueden repartirse con los trabajadores y retomar los espacios para que nos dejen un uso o recurso para no estar perdiendo más dinero ahí.