EU promete no intervenir en decisiones de GM y Chrysler

El Tesoro de Estados Unidos no pretende influir en las decisiones gerenciales de General Motors y Chrysler, tras inyectarles cerca de U$70,000 millones a las automotrices para financiar su reestructuración en quiebra, dijo el lunes un asesor de la Casa Blanca.

"El Gobierno de Obama es un accionista pasivo en New General Motors así como en New Chrysler", aseguró Ron Bloom, el asesor senior del grupo de trabajo para el sector automotor designado por la Casa Blanca, según un discurso a un comité supervisor del Congreso que se reúne en Detroit.

Bloom sostuvo que la ayuda estatal de emergencia evitó la quiebra de dos de las tres mayores automotrices del país, pero agregó que "en un mundo mejor, la decisión de intervenir no se tendrá que tomar".

Bloom comentó que el éxito de los esfuerzos del gobierno de Obama por salvar GM y Chrysler serán juzgados según cómo y cuándo se devuelva el dinero del rescate a los contribuyentes.

Una oferta pública inicial de acciones en una reestructurada GM podría realizarse en el 2010 e incluir una combinación de acciones nuevas y la venta del paquete en manos del Estado, agregó el asesor.

"Los contribuyentes pusieron un montón de dinero y quieren su dinero de vuelta", añadió.

Bloom respondió a las preguntas de un comité de supervisión del Congreso establecido en el 2008 para revisar el uso de U$700,000 millones entregados para estabilizar los mercados financieros, bajo el Programa de Alivio de Activos en Problemas.

El comité, que encabeza la profesora de leyes de la Universidad de Harvard Elizabeth Warren, se reunió el lunes en Detroit para escuchar a varios funcionarios, ejecutivos y otros expertos sobre el plan de rescate automotor del gobierno.

En su discurso, Bloom afirmó que el grupo de trabajo está observando de cerca la salud financiera de los proveedores de partes automotrices.

RDS/doch