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Los mexicanos son empresarios que no se rinden, reconocen en Holanda
Los mexicanos son empresarios que nunca se rinden y por eso se cuentan entre los mejores socios posibles en el mundo, reconocieron empresarios del sector agroindustrial de Holanda.
Los mexicanos son empresarios que nunca se rinden y por eso se cuentan entre los mejores socios posibles en el mundo, reconocieron empresarios del sector agroindustrial de Holanda.
Durante un recorrido por la granja de Vencomatic Group, grupo de cinco empresas dedicadas a la crianza sustentable de gallinas ponedoras con un modelo de la Universidad de Wageningen, su director comercial para las Américas, Harry Luimes, destacó las virtudes de sus socios mexicanos.
Con una experiencia de 28 años en México, a través de Agromex-Holanda Group, que cuenta con un promedio de 40 millones de gallinas, hemos aprendido a admirar la movilidad de los empresarios mexicanos, que siempre van hacia adelante .
Eso les ha permitido la aplicación del modelo de crianza, en el que las gallinas se mueven libremente en un amplio espacio, siguiendo sus comportamientos naturales, en lugar de confinarlas en jaulas, lo que disminuye el estrés y genera productos de mejor calidad.
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Combinada con los procesos de automatización inventados por Cor Van de Ven, que prácticamente eliminan el contacto de las manos humanas con el producto (lo cual disminuye severamente el riesgo de transmisión de enfermedades), la empresa asociada con productores mexicanos ha logrado buena presencia.
Desde el punto de vista de Van de Waarenburg, esto se debe también a que en México existe un clima de negocios excelente, comparable incluso con Estados Unidos y donde se ha encontrado que los empresarios mexicanos están cada día más abiertos a la innovación.
De hecho, empresas como Grupo Bimbo han comenzado a comprar huevos producidos mediante este sistema, pues su calidad es mayor, mientras que grupos como la Unión Avícola Nacional, AvioGrupo y la empresa Mr. Eggs han adquirido la tecnología automatizada.
El sistema de automatización creado por Cor van de Ven, propicia que las gallinas pongan un huevo diario cada una por un periodo de 62 semanas, hasta llegar al final de su vida productiva y convertirse, a su vez, en producto comestible.
Además, el sistema de crianza establecido en la granja de Eersel por la empresa Rondeel Eggs (parte de Ventomatic Group), ayuda a que los animales estén más sanos, al seguir sus propios patrones naturales de comportamiento.
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Por otro lado, en el centro de Westland, una de las ocho provincias de Holanda, se encuentra un complejo de 1,500 metros cuadrados de invernaderos de cristal, donde se cultivan 50 variedades de jitomate con mínimas cantidades de agua.
Se trata de una asociación de productores llamada Tomato World , cuyo interés consiste en exportar la mejor tecnología agropecuaria y de invernaderos, que les ha permitido cultivar este producto todo el año, pese al clima frío y lluvioso que persiste por más de ocho meses al año en este país.
El grupo lleva cuatro años asociado con productores mexicanos, en quienes René van Paasen, gerente regional, reconoce un excelente nivel técnico en los sistemas de cultivo, similar al que ellos mismos han desarrollado a lo largo de 30 años de investigación.
En Guadalajara y Querétaro, se logran muy buenas cosechas con un uso muy racional del agua, a pesar de que los invernaderos no son de cristal, como en los Países Bajos, sino de plástico.
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Explicó que en México, la productividad por metro cuadrado alcanza los 60 kilos en las variedades grandes y los 23 en las variedades baby , mientras en Holanda la relación es de 70 kilos y 29 kilos, respectivamente.
Para poner en perspectiva este tipo de productividad, en países como España, se producen 24 kilos de variedades grandes de tomate por metro cuadrado y 6 kilos de variedades baby por metro cuadrado.
El grupo ha desarrollado un sistema de cultivo que casi elimina el uso de riego, pues emplea agua de lluvia (en Holanda, por ley este recurso se recicla) a través de un método hidropónico y reduce también el uso de insecticidas, pues se emplean básicamente insectos para combatir plagas y fertilizar las plantas.
Esta unión de productores, ha encontrado en México socios con un excelente nivel técnico, si bien todavía se trabaja en mejorar el manejo del agua.