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Nubarrones sobre el mercado por volatilidad cambiaria

Subaru expandirá su red de distribuidores y renovará sus productos en el segundo semestre.

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La turbulencia del tipo de cambio entre el peso mexicano y el dólar al cierre del 2015 y en el primer trimestre del 2016 afectó a los importadores en la industria automotriz, y los obligó a reaccionar y adaptarse a la adversidad.

No es fácil decirle al cliente que de repente subes 4 o 5% el precio. Eso ha sucedido en los últimos ocho meses, pero es un factor macroeconómico que no podemos controlar, por más coberturas y más protecciones que hagamos , refiere Jesús Vera, director general de Subaru en México.

Subaru trae vehículos de sus plantas en Indiana, EU y de Gunma, Japón. En el mercado mexicano lleva 35 meses consecutivos con récord en ventas, pero las operaciones con Japón las tengo que pagar en yenes y las de EU en dólares. Definitivamente, traemos 20% de devaluación en las monedas y eso nos está impactando directamente , comentó Vera.

Haciendo frente

Jesus Vera se muestra optimista para afrontar la segunda parte de este 2016. El objetivo del equipo al que dirige es el de alcanzar un nivel de ventas de 2,400 unidades, para lo cual la marca emprendió estrategias innovadoras. Tomó la decisión de absorber el alza en las tasas de financiamiento de 0.25% que hubo en semanas anteriores, para no afectar las tasas internas que tenemos con los clientes .

Paralelamente, planea expandir su red de distribuidores; en el 2015 sumó cinco, para pasar de 16 a 21, y este año abrirán cinco más.

La otra estrategia es renovar su oferta de productos con el crossover XV, que ya registra 23% de las ventas, mantiene el Forester, que será actualizado, y habrá un cambio total para Impreza (sedán y hatchback), así como una camioneta completamente nueva.

marcos.martinez@eleconomista.mx

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