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Pagará Grupo México daños y remediación

Anuncia el gobierno federal acuerdo con la firma minera para financiar el resarcimiento de afectaciones ocasionadas por el derrame tóxico en ríos de Sonora; el monto podría crecer, de requerirse más recursos.

El gobierno federal anunció una partida, inicialmente de 2,000 millones de pesos, aportados por Grupo México, para reparar los daños materiales generados por el derrame de sulfato de cobre en los ríos Sonora y Bacanuchi, en la mina Buenavista del Cobre, en Cananea.

Los trabajos para contrarrestar las afectaciones ambientales y resarcir daños a los habitantes de las comunidades impactadas por el derrame de 40,000 metros cúbicos de sulfato de cobre serán determinados y supervisados por un comité técnico que se conformará en los próximos días y estará integrado por especialistas, académicos y representantes de los organismos involucrados.

Las empresas Buena Vista del Cobre y Operadora de Minas e Instalaciones Mineras, subsidiarias de Grupo México, se han obligado ante el gobierno de la República a reparar totalmente el daño ambiental y a reparar los daños materiales a las personas por este derrame , dijo Ildefonso Guajardo, titular de la Secretaría de Economía (SE).

Agregó que el fideicomiso contará en principio con 500 millones de pesos, y Grupo México aportará cantidades similares hasta sumar los 2,000 millones establecidos como monto tentativo para subsanar los daños. Lo anterior no exime a la empresa de las multas ya determinadas, que podrían ascender a 44.5 millones de pesos.

A partir de las determinaciones del comité técnico, de ser insuficiente esa cantidad, la empresa hará aportaciones adicionales, independientemente de las sanciones que deriven de los juicios por daño ambiental.

En principio, Grupo México se había resistido a cubrir los daños causados por el derrame de sustancias químicas tóxicas, ocurrido en sus minas el 6 de agosto.

Durante una conferencia en la que participaron también el consejero jurídico y el vocero de la Presidencia, Humberto Castillejos y Eduardo Sánchez, respectivamente, afirmaron que el fideicomiso se creará de inmediato, igual que el comité técnico, porque es la forma más rápida para detener y corregir las afectaciones.

Humberto Castillejos destacó que la Ley Federal de Responsabilidad Ambiental establece que quien cause un daño ambiental debe repararlo, y de no ser posible, compensarlo económicamente; existen los procedimientos administrativos y judiciales para llegar a este objetivo .

Consideró que la compañía habría podido tomar la decisión de irse a tribunales, en los cuales, entre demandas, instancias posteriores y eventuales amparos, los plazos del juicio serían más prolongados, y hasta tener el fallo se procedería a tomar los bienes para asegurar el pago de los daños.

 

Señales claras: Guajardo

El secretario de Economía destacó que la medida, a partir del acuerdo con Grupo México, es importante porque permite enviar señales claras a inversionistas y a la sociedad. Los inversionistas tendrán la certeza de que sus proyectos están protegidos por un marco legal transparente, y para la comunidad, la confianza de que se aplicará la ley cuando la situación lo amerite .

Aclaró que la concesión de Grupo México para operar la mina Buenavista no peligra si la empresa repara el daño .

En ese contexto, Juan José Guerra Abud, titular de la Secretaría del Medio Ambiente (Semarnat), precisó que las reclamaciones de personas afectadas en su salud, su patrimonio o actividad productiva en las zonas de los ríos que se contaminaron serán evaluadas por el comité técnico para resarcirlas.

Con la creación del fideicomiso se logra aplicar la ley y al mismo tiempo garantizar la operación sustentable de una inversión que genera empleos, explicó.

Tragedias ambientales: Pemex, a la palestra

La vocación petrolera de México también le ha traído serias consecuencias en materia de daño ambiental, en la cual Pemex ha protagonizado diversos episodios de polución al agua.

1979

pozo Ixtoc 1 de Pemex. Al estarse perforando a 3,627 metros de profundidad, se produjo el accidente, con el flujo de aceite y gas a presión, lo que provocó un derrame que no se pudo controlar hasta 10 meses después.

2012

LA terminal marítima de la Refinería Antonio Dovalí Jaimes en Oaxaca registra un derrame de hidrocarburos que deriva en la muerte de tortugas golfinas y daños a manglares. La Profepa presentó una denuncia penal.

2014

A finales de agosto de este año se registró una fuga de hidrocarburo en el poblado Pico de Oro en San Miguel, Huimanguillo, Tabasco, luego de que delincuentes intentaran robar gasolina. Se vieron afectadas 20 hectáreas.

2014

A inicios de septiembre del 2014 una fuga de gasolina Premium de una toma clandestina en Tierra Blanca, Veracruz, contaminó 2 kilómetros del Arroyo Hondo y mató a decenas de animales marinos, terrestres, aves y flora.

Crónica de la tragedia ambiental

hugo.valenzuela@eleconomista.mx

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