Turismo gay en la mira del DF

Los turistas homosexuales redituaron a la ciudad de México 6 millones de pesos en el segundo semestre de 2010, de acuerdo con datos de la Oficina de Turismo Lésbico-Gay Bisexual y Transexual (LGBT).

El encargado de esa oficina dependiente de la Secretaría de Turismo del Distrito Federal, Erwin Romero Montiel, señaló que de continuar esta tendencia, la capital podría convertirse en un destino de alcance internacional en poco tiempo.

En entrevista, Romero Montiel destacó que "los avances sociales, concretamente la ley que permite los matrimonios entre personas del mismo sexo, así como la política del gobierno local, han abierto grandes posibilidades para este nicho de mercado".

Aseguró que el turismo LGBT es uno de los más atractivos para el sector, pero no ha sido explotado en el Distrito Federal con todo su potencial.

Las estadísticas de otros países recabadas indican que el llamado 'pink-market' o mercado para homosexuales está valuado en más de 560 millones de dólares, refirió.

La oficina, creada en julio, ha generado una base de datos con estudios de mercado hechos en el extranjero que destaca que el turista gay reditúa mil 166 dólares promedio por persona cada vez que sale de vacaciones, comparado con 627 que consume un heterosexual.

"Esta información viene de Estados Unidos, de Canadá, lugares donde el turismo gay tiene una larga trayectoria. Aquí tenemos que empezar a escribir nuestra propia historia", explicó.

Romero Montiel comentó que en los seis meses de existencia de su dependencia se han organizado tres eventos fundamentales para promover la imagen de la ciudad de México como destino abierto a la diversidad sexual.

"Se le organizó una luna de miel a la primera pareja gay que contrajo matrimonio en Argentina, participamos en la Feria Internacional de las Américas y organizamos el Primer Congreso de Turismo LGBT para generar un acercamiento con los empresarios interesados", detalló.

El funcionario adelantó que para 2011 impulsará muchas más acciones que posicionen a la capital como 'gay friendly' (amistosa para homosexuales), ya que "en más de 90% de los casos es el principal factor que se toma en cuenta para elegir un destino turístico".

Explicó que de acuerdo con su amplia experiencia como turista y agente de viajes, el pronunciamiento 'vamos a ser gay-friendly' engloba el conocimiento de reglas y líneas básicas de comunicación entre los prestadores de servicios y los consumidores, así como un trato de igualdad y de respeto a la diversidad.

"No se trata de que el negocio ponga una bandera del arcoiris y ya, los empleados deben saber cómo tratar a los clientes gay, cubrir sus necesidades específicas y crear paquetes turísticos dirigidos a ellos", aclaró.

El objetivo a largo plazo, continuó, es "convertir a la ciudad de México en un destino LGBT a la altura de San Francisco, Toronto o Buenos Aires", los cuales ya se han posicionado como íconos de la apertura a la diversidad sexual, atrayendo gran parte del mercado.

"Por ejemplo, Argentina", abundó: "tras la aprobación del matrimonio entre las personas del mismo sexo a nivel federal, el turismo gay pasó de ser 18 por ciento del total en 2008, a 21 por ciento en 2010".

El plan de trabajo de la oficina de turismo LGBT es atraer tres mercados en particular: Estados Unidos y Canadá, los más grandes del mundo, así como Latinoamérica, en el que se incluyen los mexicanos que a su decir conforman 10 por ciento de la población total del país.

"Hoy tenemos que ser una opción para nuestros connacionales y también para los extranjeros", expresó el encargado de la Oficina de Turismo Lésbico-Gay Bisexual y Transexual.

Entre las acciones que se han planeado está "crear productos dirigidos a la comunidad gay que rescaten nuestras tradiciones mexicanas. Así como en otros lugares existe el Halloween week, aquí buscaremos crear un producto que rescate nuestro Día de Muertos especialmente diseñado para los turistas LGBT", adelantó.

En el ámbito empresarial, la oficina a cargo de Romero Montiel buscará estructurar un programa de capacitación para los empleados de aquellos negocios que deseen integrarse al proyecto, con el fin de proporcionar servicios de óptima calidad para todos.

"En las aerolíneas podría crearse un paquete turístico exclusivo, como yo alguna vez propuse en mi trabajo, crear un VTP del arcoiris", recordó.

El proyecto más importante consistirá en el establecimiento de mecanismos y reglamentaciones que permitan emitir una certificación oficial de la Secretaría de Turismo del Distrito Federal para aquellos negocios que cumplan los requisitos mínimos para promocionarse como 'gay friendly'.

"El turista gay es tanto o más exigente que el turista heterosexual, fácilmente descubrirá un engaño", pero la certificación permitirá controlar mejor los estándares de calidad, concluyó Romero Montiel.