En pensiones, es posible construir sobre lo ya avanzado

En lo que respecta a las pensiones y a los sistemas de ahorro para el retiro, México ha aprendido de las experiencias de ciertos países de América Latina y, también, ha sido ejemplo para otros. Por ejemplo, en 1997 el sistema de ahorro para el retiro mexicano se inspiró del modelo chileno, tomando lo mejor y adaptándolo a la realidad mexicana. Sin embargo, hoy en día el sistema que tenemos en el país es más cercano al colombiano que al chileno.

Un problema común de los sistemas de ahorro para el retiro de los países latinoamericanos ha sido contener, permanentemente, la atracción que sienten gobiernos democráticos, pero que cuentan con una bolsa de recursos públicos escasos, de usar el dinero del sistema de ahorro para financiar proyectos que, al momento, se juzgan urgentes.  La historia de países que han revertido el sistema de contribuciones, como lo hizo Argentina frente a la tentación de financiar gasto público, ha llevado a que el gobierno actual enfrente la incertidumbre del pago de pensiones de los trabajadores argentinos, lo que tiene consecuencias inconmensurables.

El ahorro de los trabajadores de los sistemas de contribución individual ha acumulado en los últimos decenios grandes cantidades de recursos. En México esta cifra alcanza 18% del PIB. Por lo que, en momentos de crisis económica y financiera, los fondos de pensiones se vuelven una tentación que debe contenerse.  De hecho, en los últimos meses, en México atestiguamos algunas iniciativas, sin mucho apoyo ni de la administración ni de las bancadas, para estatizar los ahorros de los trabajadores.

De ahí que el anuncio realizado por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, a finales de julio haya sido tan importante. El presidente emitió un mensaje claro de que se construirá sobre lo que nos ha costado 23 años fundar, desarrollar y perfeccionar, y no echarlo abajo. El gobierno de México tiene muy claro que regresar a sistemas de beneficios definidos, de grandes pensiones, no es sostenible y es, de hecho, imposible.

El sistema de ahorro para el retiro, con los ajustes propuestos en la reforma que se discutirá en las próximas semanas, promete aumentar la cantidad de personas que tendrán derecho a una pensión, así como el monto de ésta, manteniendo un esquema que ha sido valioso para dar certidumbre a los inversionistas, mantener la prudencia fiscal y fomentar el acceso a mercados financieros para la inversión productiva, incrementando las posibilidades de crecimiento del país y el beneficio de los mexicanos.