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Biden deja a un lado la moderación en el tema migratorio
En su duelo con Donald Trump, el presidente de EU hace escalar sus propuestas antiinmigrantes; 63% ve al republicano “demasiado radical”.
Washington. Donald Trump exhortó ayer lunes a los republicanos en el Congreso a oponerse al acuerdo que prevé un paquete de ayudas de millones de dólares para Ucrania, Israel y una reforma que endurece el sistema migratorio estadounidense.
"Sólo un idiota, o un demócrata radical de izquierda, votaría por este horrible proyecto de ley fronteriza que solo da una autoridad de cierre después de 5,000 interceptaciones diarias cuando ya tenemos el derecho de CERRAR LA FRONTERA AHORA, lo que debe hacerse", dijo en su red Truth Social.
La reacción de Trump se da un día después de que el Senado presentara un proyecto de ley bipartidista de seguridad fronteriza de 118,000 millones de dólares.
El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, dijo que tomaría medidas para celebrar la votación del proyecto de ley mañana miércoles.
El proyecto enfrenta a opositores de ambos partidos, pero el domingo sus respectivas cúpulas llegaron a un acuerdo.
De ser adoptado, las autoridades podrán restringir los cruces fronterizos si la media diaria de migrantes alcanza los 4,000 en una semana, pero estarán obligadas a prohibirlos si sobrepasan un promedio de 5,000 al día -en un periodo de siete consecutivos- u 8,500 en una sola jornada, se lee en el texto del acuerdo bipartidista.
La senadora independiente Kyrsten Sinema dijo a los periodistas que la legislación aseguraría la frontera sur de Estados Unidos, incluso exigiendo al Departamento de Seguridad Nacional que la cierre si hay un promedio de más de 5,000 intentos de cruce por día durante siete días.
"¡¡¡No sean ESTÚPIDOS!!! Necesitamos un proyecto de ley independiente sobre fronteras e inmigración", afirmó Trump en su mensaje, en el que pide que no esté vinculado "a la ayuda exterior de ninguna manera". "Los demócratas rompieron la inmigración y la frontera. Deberían arreglarlo", añadió.
Presiones asfixiantes
El entorno político eleva la temperatura de la Casa Blanca. Este fin de semana se reunieron 13 gobernadores republicanos con el respectivo del estado de Texas, Greg Abbott.
Abbott se ha convertido en el enemigo público número uno del presidente Joe Biden. De manera paralela viajaron a Texas miles de personas pertenecientes a agrupaciones de la extrema derecha. Perfiles similares a los que asaltaron el Capitolio el 6 de enero de 2021.
El gobernador de Texas ha implementado acciones contra la inmigración en la frontera con México, y al mismo tiempo, se ha brincado la ley federal de seguridad que debe de ser aplicada por la presidencia.
La semana pasada el canal de noticias CNN reveló una encuesta sobre la opinión de los estadounidenses respecto a si Trump y Biden son “demasiados extremistas”.
El 63% dijo que Trump es “demasiado extremo” mientras que para el 38% Biden le parece demasiado extremo.
Biden ha endurecido medidas en el tema migratorio; Trump, como respuesta, también se ha radicalizado.
