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CIJ califica como ilegales los asentamientos israelíes en territorio palestino
Nawaf Salam, presidente de la Corte Internacional de Justicia, dijo que los asentamientos de Israel en Cisjordania y Jerusalén Este, y el régimen asociado a ellos, se mantienen en violación del derecho internacional.
El máximo tribunal de las Naciones Unidas afirmó que los asentamientos israelíes en los territorios palestinos ocupados son ilegales y que todos los Estados deben cooperar para poner fin al conflicto palestino-israelí, en una importante opinión consultiva emitida el viernes.
Las conclusiones de los jueces de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) no son vinculantes, pero tienen peso en el derecho internacional y pueden debilitar el apoyo a Israel.
"Los asentamientos israelíes en Cisjordania y Jerusalén Este, y el régimen asociado a ellos, se han establecido y se mantienen en violación del derecho internacional", dijo el presidente Nawaf Salam, al leer las conclusiones de un panel de 15 jueces.
El dictamen afirma que Israel debía indemnizar a los palestinos por los daños causados por la ocupación. También establece que el Consejo de Seguridad de la ONU, la Asamblea General y todos los Estados tienen la obligación de no reconocer la ocupación como legal y de no prestar ayuda o apoyo para mantenerla.
El caso tiene su origen en una petición de la Asamblea General de la ONU de 2022, anterior al actual conflicto entre Israel y Hamás en Gaza que comenzó en octubre.
Israel capturó Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén Este –zonas de la Palestina histórica que los palestinos quieren para un Estado– en una guerra de 1967 y desde entonces ha construido asentamientos en Cisjordania y los ha ampliado constantemente.
Los líderes israelíes han argumentado que los territorios no están ocupados desde el punto de vista jurídico porque se encuentran en tierras disputadas, pero las Naciones Unidas y la mayor parte de la comunidad internacional los consideran territorio ocupado por Israel.
En febrero, más de 50 Estados expusieron sus puntos de vista ante la corte, y los representantes palestinos pidieron al tribunal que dictamine que Israel debe retirarse de todas las zonas ocupadas y desmantelar los asentamientos ilegales.
Israel no participó en las audiencias, pero presentó una declaración escrita en la que decía al tribunal que emitir una opinión consultiva sería "perjudicial" para los intentos de resolver el conflicto palestino-israelí.
La mayoría de los Estados participantes pidieron la Corte Internacional de Justicia que declarara ilegal la ocupación, mientras que unos pocos, entre ellos Canadá y Reino Unido, argumentaron que debía negarse a emitir una opinión consultiva.
Estados Unidos, el más firme defensor de Israel, instó al tribunal a limitar cualquier opinión consultiva y a no ordenar la retirada incondicional de las fuerzas israelíes de los territorios palestinos.
En 2004, la CIJ emitió una opinión consultiva según la cual la barrera de separación israelí alrededor de la mayor parte de Cisjordania era "contraria al derecho internacional" y los asentamientos israelíes se habían establecido infringiendo el derecho internacional. Israel desestimó dicha sentencia.