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Con Brexit, récord de inmigrantes cruzando el Canal de la Mancha
Boris Johnson prometió que al salir de la Unión Europea su país bajaría el número de refugiados; promesa incumplida, 700 en un solo día.
Londres. Casi 700 inmigrantes y solicitantes de asilo cruzaron el Canal de la Mancha hacia el Reino Unido el lunes, lo que supone un nuevo récord en lo que va de este año, de acuerdo con las cifras divulgadas por el Ministerio británico de Defensa.
Las últimas llegadas sugieren que la controvertida política del gobierno de deportar a Ruanda a los que intentan la peligrosa travesía no logra disuadirlos.
El ministerio de Defensa indicó que llegaron 696 inmigrantes quienes hicieron el trayecto desde las costas francesas en 14 pequeñas embarcaciones, el mayor número diario en el 2022 y solo la segunda vez este año que se superan los 600. La llegada de estos migrantes se da en momentos en que las autoridades vuelven a debatir un endurecimiento de las leyes con un aumento de las penas para aquellos que entren ilegalmente en Reino Unido, que podrían enfrentar hasta cuatro años de prisión.
Grandes grupos de personas, incluidos niños pequeños, fueron llevados a tierra en Ramsgate, en la costa de Kent, en el sureste de Inglaterra, antes de ser trasladados en autobús a centros de procesamiento.
El Gobierno confirmó que durante julio unas 3,683 personas y 90 embarcaciones cruzaron el canal, el mes con las cifras más altas hasta la fecha.
Mientras que en lo que va del 2022 más de 17,000 personas han llegado al Reino Unido tras cruzar el Canal de la Mancha --una de las rutas marítimas más transitadas del mundo-- en pequeñas embarcaciones, según datos del gobierno.
Más de 28,500, la mayoría hombres jóvenes, llegaron a las costas británicas el año pasado.
El récord diario, 853, se estableció en noviembre del 2021.
El número de cruces fluctúa a lo largo del año, en función de las condiciones meteorológicas y de las medidas de control en la costa norte de Francia.
Política de devoluciones
En un intento de disuadir las llegadas ilegales y en el marco de un acuerdo, el Reino Unido anunció hace tres meses una nueva política de devoluciones a Ruanda con el objetivo de que la tramitación de sus peticiones se haga en ese país. El plan ha sido duramente criticado por partidos de la oposición y por organizaciones humanitarias.
Sin embargo, el primer vuelo que debía despegar en junio pasado fue suspendido por problemas legales y la política sigue estancada, por lo que la anunciada medida por ahora no logró disuadir a quienes buscan cruzar hasta Reino Unido.
El Reino Unido ha estado enviando a Francia decenas de millones de euros anuales para ayudar a detener las travesías en barco, incluso para patrullas de playa adicionales y equipos apropiados como gafas de visión nocturna.
Rishi Sunak y Liz Truss, los dos rivales conservadores que aspiran a suceder al primer ministro británico, Boris Johnson, han prometido mantener la política de Ruanda.