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Critican sentencias a incitadores de violencia en Londres
Las sentencias de cuatro años a Jordan Blackshaw y Perry Sutcliffe-Keenan fueron vistas como "manazos" por algunos funcionarios y "desproporcionadas" por abogados.
Londres.- La imposición de las primeras sanciones a participantes en los disturbios en Londres y otras ciudades inglesas, ha generado una polémica que inclusive afecta a la coalición de gobierno, pues se les considera desproporcionadas.
Jordan Blackshaw y Perry Sutcliffe-Keenan, de 20 y 22 años de edad, respectivamente, fueron castigados con cuatro años de cárcel por incitar al desorden a través de redes sociales, explicó este miércoles The Guardian.
Eric Pickles, secretario de Comunidades, en el programa Today de BBC Radio 4, dijo que sería erróneo que los responsables de incitar a la violencia sólo recibieran un "manazo".
Pero anoche, en otro programa de la BBC, Tom Brake, vocero de asuntos del Interior del partido Liberal Democrático, en el gobierno con los Conservadores, dijo que si esa incitación hubiera sido antes de la ola de disturbios, la sentencia habría sido diferente.
El 4 de agosto un hombre de 29 años de edad fue muerto por la policía londinense en un incidente aún en investigación, hecho que generó una protesta dos días después que derivó en una ola de violencia que prácticamente duró una semana.
El ministerio británico del Interior informó que esa violencia dejó 2,800 detenidos, de los cuales a 1,300 se les han levantado cargos y 1,000 ya han comparecido ante un juez, pero la policía señala que llevará meses identificar y capturar a todos los líderes.
Grupos defensores de derechos civiles y abogados también han criticado las sentencias, pues señalan que hay falta de proporcionalidad, cuya existencia en un principio del sistema de justicia.
Además, se ha sabido que asesores de los jueces ante los que comparecen los acusados, aconsejaron que las sentencias que serían habituales sean ignoradas, lo que también ha despertado críticas y generado la advertencia de que podría desatarse un alud de apelaciones.
Pero Pickles acotó que sentencias ejemplares son necesarias en esta ocasión, y que la gente se alarmaría si las incitaciones a la violencia fueran castigadas en forma leve.
Sutcliffe-Keenan uso su cuenta de Facebook para diseñar una página que llamó "The Warrington Riots", lo que generó una ola de pánico en su vecindario, según la corte que revisó su caso, aunque ninguno de sus 400 contactos atendió a su llamado.
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