El ejército ultrasecreto de EU

Los bombarderos teledirigidos y fuerzas paramilitares de la CIA han eliminado a docenas de líderes y miles de combatientes de Al-Qaeda. Pero existe otra organización misteriosa que ha matado a muchos más enemigos de EU en la década transcurrida desde los ataques terroristas del 11 de septiembre.

Desde los ataques del 9/11, este ultrasecreto grupo de hombres (y algunas mujeres) ha crecido 10 veces, alcanzando un nivel de invisibilidad que ni la CIA ha logrado. Somos la materia oscura. Somos la fuerza que organiza el universo, pero que no es visible , expuso un elemento de los Seals de la Armada, quien pide el anonimato.

Los Navy Seals son apenas una parte del Comando Conjunto de Operaciones Especiales, conocido como JSOC, que evolucionó de ser un rara vez utilizado equipo de rescate de rehenes a un ejército secreto. Cuando algunos de sus integrantes mataron a Osama bin Laden en mayo, los mandos del JSOC celebraron no sólo el éxito de la misión, sino el que pocos sabían de la existencia del JSOC, cuya sede es Fayetteville, Carolina del Norte.

Dos presidentes y tres secretarios de la Defensa han recurrido al JSOC para misiones delicadas en Irak y Afganistán, pero también en países con los que EU no estaba en guerra como Yemen, Pakistán, Somalia, Filipinas, Nigeria y Siria.

Creado en 1980 pero reinventado en años recientes, el JSOC creció de 1,800 elementos justo antes del 9/11, a 25,000 en la actualidad. Cuenta con su propia división de inteligencia, sus propios aviones no tripulados y de reconocimiento y hasta sus propios satélites dedicados. También tiene su propia unidad de ciberataques, la que el 9/11 del 2008 colapsó todos los portales yihadistas conocidos.

Cuando sus integrantes trabajan en embajadas o consulados, lo que ocurre con frecuencia, nunca usan uniforme ni identificación. Sus comandantes casi nunca hablan en público. El JSOC no tiene portal; recibe órdenes solo del Presidente o el Secretario de la Defensa y su cadena de mandos es estrictamente militar.  

Con Bush, las actividades del JSOC nunca se informaban al Congreso, bajo el criterio de que se trata de operaciones militares que no requieren reporte específico, pero Obama ha insistido en que las misiones más delicadas deben informarse a un selecto círculo de líderes legislativos.