Estado Islámico secuestra a dos norcoreanos

A pesar de estar separadas a lo largo del planeta, dos de las entidades más controvertidas en el mundo pueden ahora encontrarse entrelazadas: el Estado islámico y el gobierno de Corea del Norte.

De acuerdo con el observador de Libia, una publicación local que informa a través de Facebook, indicó que un médico de Corea del Norte de 60 años de edad y su esposa fueron secuestrados por militantes del Estado Islámico en la ciudad de Sirte, en su camino de regreso a Trípoli, la semana pasada. La Embajada de Corea del Norte informó que trabajan para averiguar la ubicación de la pareja y lograr su liberación. No hay muchos detalles por el momento, pero la noticia ha sido recogida por varios medios de Corea del Sur

Independientemente de si se confirma el informe sobre los norcoreanos, el caso llama la atención sobre algunos vínculos sorprendentes entre el reino ermitaño y el problemático estado del norte de África, una relación que se remonta a los años 1970 y 1980, cuando el líder libio Muammar Gadafi con frecuencia compró a Pyongyang armamento e incluso visitó Corea del Norte para reunirse con Kim Il Sung.

En algún momento, Libia también se convirtió en el destinatario de un número indeterminado de trabajadores médicos norcoreanos enviados al extranjero por el régimen de Kim. Sin embargo, después de la guerra civil de Libia, la relación de Corea del Norte con el país se hizo más complicada. Cuando Gadafi fue asesinado en el 2011, la prensa de Corea del Sur informó que Kim Jong Il, hijo y sucesor de Kim Il Sung, dijo a los norcoreanos que trabajaban en Libia -alrededor de 200- que permanecieran en el país y no regresaran a casa. Según Yonhap, Piongyang tenía miedo de que un estilo de revuelta como la primavera árabe se extendiera a Corea del Norte.