Buscar
Geopolítica

Lectura 2:00 min

Explotan químicos en planta y no hay agua potable

Diversas explosiones e incendios se registraron en la planta química de Arkema Inc., al noreste de Houston, que fue severamente afectada por las inundaciones causadas por la tormenta Harvey. Tras las explosiones, 15 funcionarios fueron hospitalizados.

Houston. Diversas explosiones e incendios se registraron en la planta química de Arkema Inc., al noreste de Houston, que fue severamente afectada por las inundaciones causadas por la tormenta Harvey. Tras las explosiones, 15 funcionarios fueron hospitalizados.

Los dueños de la planta advirtieron que se prevé que haya más explosiones debido a la pérdida de refrigeración que causó que los químicos almacenados se deterioraran e incendiaran, arrojando una nube de humo irritante.

Inicialmente, la Agencia Federal de Manejo de Emergencias dijo que el humo era sumamente peligroso , pero luego se retractó, admitiendo que había emitido esa calificación por precaución extrema.

Entre tanto, la ciudad de Beaumont, situada a 180 km al este de Houston, se ha quedado sin agua potable después de que dos sistemas que la bombean fallaran.

Los cerca de 120,000 habitantes puede que no puedan ver el servicio restaurado hasta que se hayan acabado las inundaciones.

Las inundaciones también volcaron dos tanques de almacenaje de petróleo en el sur de Texas, derramando casi 113,000 litros de crudo. No quedaba claro de inmediato si se pudo limpiar algo de ese combustible.

Los bomberos estaban atentos a la sombría posibilidad de hallar más muertos, lo que elevaría el saldo de víctimas fatales, actualmente de 31. Advirtieron que podría tomar hasta dos semanas registrar todos los vecindarios, ya que en algunos lugares el agua tiene una profundidad de 1.20 metros .

Por su parte, el presidente Trump prometió donar 1 millón de dólares de su fortuna para los damnificados por Harvey que continúa su camino por Louisiana, aunque ya como una depresión tropical.

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete