Hijo de líder libio continúa desafiante

Trípoli. Saif Al-Islam Gaddafi, el influyente segundo hijo del líder libio, quien en algún momento era considerado la gran esperanza para la reforma del país, está claro en dos cosas: el gobierno libio no ha hecho nada malo y no se va a rendir.

En una entrevista que refleja la arrogancia de la familia Gaddafi luego de dos meses de esfuerzos infructuosos por sofocar una rebelión apoyada por Estados Unidos y sus aliados, Saif, de 38 años, afirma que el mundo se lanzó a la guerra contra Libia sin otra base que los rumores y la propaganda.

Según la versión de Saif Gaddafi, éste fue traicionado por su mejor amigo , quien defeccionó para unirse a los rebeldes. El gobierno de su padre está sitiado por Al-Qaeda. Además, el gobierno del presidente Obama ha demostrado que no es diferente al de su antecesor, George W. Bush.

Los comentarios enfatizan la invariable posición del gobierno libio, justo cuando los enfrentamientos contra los rebeldes han llegado a un punto muerto y hay desacuerdos en el seno de la OTAN. Aunque hubo algunas indicaciones este mes de que Saif Gaddafi podría estar interesado en una solución diplomática a la crisis, sus comentarios durante la entrevista sugieren que los altos mandos de Trípoli no tienen prisa por encontrar una salida política.

Como para poner de relieve ese punto, las fuerzas de Gaddafi siguieron bombardeando el domingo y lunes la sitiada ciudad de Misurata, el único reducto rebelde de Libia occidental. El lunes, el gobierno municipal confirmó 17 muertes y un centenar de heridos. Las fuerzas del gobierno también bombardearon posiciones rebeldes en Ajdabiya, obligando a los insurrectos a replegarse a su capital de facto, Benghazi.

Obama ha dicho que la misión conjunta de la OTAN ha ayudado a salvar incontables vidas entre la población civil, evitando una masacre en Benghazi, pero en la visión de Saif Gaddafi, Obama está equivocado.

Deseamos que mañana mismo los estadou-nidenses envíen a Libia una misión para aclarar los hechos. Queremos que venga Human Rights Watch a averiguar exactamente lo que ocurrió. No tememos a la Corte Internacional sobre Crímenes. Estamos confiados de que no hemos cometido ningún crimen contra nuestra gente .

Saif afirma que los que se oponen a su padre son brutales terroristas y gángsters, encabezados por Al-Qaeda, que muy pronto se habrá de colapsar por su divisionismo interno. Dice que la presunta evidencia de que el gobierno ha disparado contra su propio pueblo, dejando centenares de muertos, es categóricamente falsa .

Dijo que el caso de Libia es como las supuestas armas de destrucción masiva que Bush decía haber encontrado en Irak y que nunca aparecieron.