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Irlanda cree que Johnson incumplirá el Protocolo de Irlanda del Norte
La inspección de mercancías que llegan a Irlanda del Norte procedentes del resto de Reino Unido serían suspendidas.
Dublín. La República de Irlanda advirtió el día de ayer que las amenazas británicas de eliminar unilateralmente los controles aduaneros posbrexit en la vecina Irlanda del Norte fueron "muy mal recibidas" en la Unión Europea, haciendo temer una guerra comercial entre Londres y Bruselas.
Sin embargo, el primer ministro británico quitó importancia al conflicto en declaraciones desde Suecia, donde realizaba una visita oficial.
El comercio de la UE en Irlanda del norte es "una parte muy, muy pequeña de la economía europea, el 0.4% del valor de toda la economía" del bloque se ve concernido, afirmó.
"No creo que haya necesidad de dramatismo" pero "esto es algo que debe solucionarse" porque las disposiciones posbrexit "están elevando el coste de vida en Irlanda del Norte", subrayó.
Según el diario The Times, la ministra británica de Relaciones Exteriores, Liz Truss, está estudiando tomar medidas la próxima semana, incluyendo suspender la obligación de inspeccionar las mercancías que llegan a la región procedentes del resto del Reino Unido.
Londres quiere también que se suprima el derecho otorgado al Tribunal de Justicia de la UE para supervisar su aplicación, sustituyéndolo por un arbitraje internacional.
"No creemos que (...) los problemas restantes puedan resolverse" con medidas unilaterales, afirmó el ministro irlandés de Relaciones Exteriores, Simon Coveney.
Debe hacerse "mediante la cooperación", el "diálogo" y "trabajando juntos de una forma que permita avanzar a ambas partes", agregó durante una visita a Belfast, capital de esa región británica.
Integridad del mercado único
El protocolo, destinado a evitar una nueva frontera física en la isla que amenace la frágil paz concluida en 1998 tras tres décadas de sangriento conflicto, al tiempo que protege la integridad del mercado único europeo, es considerado por los unionistas norirlandeses como una amenaza a su lugar en el seno del Reino Unido.
Las empresas de Irlanda del Norte critican el papeleo que deben realizar para comerciar con el resto del Reino Unido y piden que se simplifique.
Pero muchos empresarios norirlandeses aplauden que se mantenga el acceso abierto al enorme mercado europeo, vetado a las empresas de la isla de Gran Bretaña.
El partido republicano Sinn Fein -exbrazo político del grupo armado IRA- ganó las elecciones regionales la semana pasada por primera vez.
Pero los unionistas del DUP -con quienes deben compartir el poder en virtud del acuerdo de paz- se niegan a formar un nuevo ejecutivo mientras el protocolo no sea modificado.