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Geopolítica

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La compleja política detrás del incidente en Libia

La muerte del Embajador de EU en Libia se convirtió, casi inmediatamente, en una escaramuza importante entre el exgobernador de Massachusetts, Mitt Romney, y el presidente Obama, un reflejo de una elección altamente polarizada en la que cualquier evento es aprovechado para obtener ventajas políticas.

La muerte del Embajador de EU en Libia se convirtió, casi inmediatamente, en una escaramuza importante entre el exgobernador de Massachusetts, Mitt Romney, y el presidente Obama, un reflejo de una elección altamente polarizada en la que cualquier evento es aprovechado para obtener ventajas políticas.

Primero a través de un comunicado la noche del martes y luego en una conferencia de prensa organizada apresuradamente ayer por la mañana, Romney trató de mostrar al incidente como un ejemplo de los mensajes mixtos y el enfoque erróneo de la política exterior de la administración Obama, al aprovechar el hecho de que la Embajada de Estados Unidos en El Cairo, donde también hubo protestas el martes, había lanzado un comunicado en el que condenaba los esfuerzos continuos por parte de personas desequilibradas a herir los sentimientos religiosos de los musulmanes . (Dicho comunicado se produjo mucho antes del ataque en Libia y antes de que comenzaran las protestas en El Cairo).

Creo que es terrible para Estados Unidos tomar el camino de disculparnos por nuestros valores , aseguró Romney en conferencia de prensa.

La campaña de Obama contraatacó: Estamos sorprendidos de que en un momento en el que Estados Unidos se enfrenta a la trágica muerte de uno de nuestros diplomáticos en Libia, el gobernador Romney utilice el incidente para lanzar un ataque político , manifestó el portavoz Ben Labolt.

Es importante recordar que pese a toda la atención que este episodio tiene y atraerá, hay poca o ninguna evidencia de que cambie la dinámica de la carrera.

La política exterior es, en el mejor de los casos, un problema a medias en la mente de la mayoría de los votantes, incluso en los mejores tiempos económicos. Si bien el ataque en Libia es un momento de alto perfil, carece de la urgencia que tiene pagar la hipoteca o mantener el empleo.

La decisión de Romney de condenar a la Casa Blanca por la supuesta disculpa es una clara réplica de la creencia de la base republicana que afirma, casi desde que el presidente Obama asumió el cargo, que ha estado más dispuesto a disculparse con los enemigos que a defender a EU.

El presidente del Comité Nacional Republicano, Reince Priebus, y el expresidente de la cámara Newt Gingrich también se incorporaron a las críticas a través de Twitter.

La campaña de Obama ve claramente una oportunidad en la declaración de Romney. Mientras que en privado se reconoce que la política exterior probablemente no decida la elección, los estrategas de Obama (y muchos políticos republicanos) creen que hay un examen intangible de comandante en jefe -que todos los rivales que buscan desbancar Presidentes- deben pasar.

Mientras que las personas no se preocupan por la política exterior tal cual, sí quieren/necesitan creer que la persona que ponen en la Casa Blanca tiene el liderazgo para representar al país en el escenario mundial. Lo que la campaña de Obama hace y seguirá haciendo es presentar la respuesta de Romney -hacer una declaración antes de que todos los hechos estuvieran disponibles- como algo poco presidencial.

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