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Obama aplaza política de inmigración a noviembre
Un movimiento unilateral en la temporada electoral podría terminar con las posibilidades de una reforma migratoria más radical en un futuro.
El presidente Obama aplazó la ejecución de su promesa de rehacer las políticas federales de inmigración a través de la autoridad ejecutiva hasta después de las elecciones intermedias, en noviembre, anunció la Casa Blanca, aumentando los temores de los demócratas de que esa medida perjudicaría sus perspectivas para mantener el control del Senado de Estados Unidos.
Funcionarios de la Casa Blanca reconocieron las profundas preocupaciones dentro del Partido Demócrata e hicieron hincapié en que la decisión de retrasar la política de inmigración también fue impulsada por el cálculo de que un movimiento unilateral en el calor de la temporada electoral podría terminar con las posibilidades de una reforma migratoria más radical, más allá de la presidencia de Obama.
En una entrevista, Obama defendió su decisión de esperar: Cuando implemente la acción ejecutiva, quiero estar seguro de que es sostenible. (...) Lo que estoy diciendo es que voy a actuar porque es lo correcto para el país. Pero va a ser más sostenible y más eficaz si el público entiende cuáles son los hechos sobre la inmigración .
En un comunicado, la Casa Blanca prometió que Obama actuaría antes de que finalice el año. Previamente, se había comprometido a actuar a finales de verano y la demora se juntó con las denuncias generalizadas de grupos de derechos de inmigrantes y críticas de los republicanos, quienes refirieron que este retraso es sólo una estrategia política.
Nunca hay un momento adecuado para que el presidente declare una amnistía por vía ejecutiva , dijo el presidente de la Cámara, John Boehner A. (republicano de Ohio), en un comunicado, pero la decisión de retrasar esta acción unilateral hasta después de las elecciones es profundamente polémica y posiblemente también sea inconstitucional -en lugar de abandonar la idea por completo-, huele a pura política .
En el programa Meet the Press, Obama rechazó las críticas de que el aplazamiento sea una maniobra táctica destinada a ayudar a los demócratas en las elecciones intermedias. Pero en las últimas semanas, un creciente número de demócratas, sobre todo en los estados más competitivos como Carolina del Norte, Luisiana y Arkansas, ha pedido públicamente a Obama retrasar o abandonar por completo sus planes de acción ejecutiva. De los estados donde los escaños del Senado están en juego en este otoño, Colorado, que tiene una población hispana considerable, fue el único donde los demócratas creían que esa medida podría funcionar a su favor.
Varias personas familiarizadas con las deliberaciones internas de la Casa Blanca citaron los esfuerzos fallidos de los Clinton en 1994 para reformar la política de atención de salud, lo cual ocasionó que los demócratas perdieran la Cámara por primera vez en 40 años. Como resultado, el problema llegó a ser tan políticamente grave que Washington no estaba dispuesto a hacer otra propuesta de dicho tema durante 15 años, hasta los primero años de la presidencia de Obama.
El senador Angus King (independiente de Maine) apoya la demora y dijo que una orden ejecutiva de Obama podría ser un error de política . La acción unilateral del presidente, expresó, podría confundir el debate, pues debería ser una discusión nacional sobre un tema importante.