España coloca deuda pese a incertidumbre

Ayer, España logró superar una prueba de mercado. El Tesoro Público logró vendió 2,468 millones de euros en bonos a tres años, el máximo que se pretendía colocar era de 2,750 millones de euros. La cifra colocada implicó 89.7% del total previsto, con una elevada demanda.

En la subasta las entidades solicitaron 5,599 millones de euros, un poco más del doble del máximo establecido.

Otro dato a destacar es que gran parte de la demanda fue del exterior; en las subastas anteriores alrededor de 50% era de inversionistas no residentes, en esta ocasión el porcentaje se elevó hasta 60 por ciento.

Al respecto, el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, consideró una buena noticia que el Tesoro Público siga colocando nuestra deuda sin ningún problema . En este sentido, atribuyó la elevada demanda de títulos a que España es un país sólido y solvente, y a la certeza de los inversionistas de que ese dinero que nos prestan lo vamos a devolver con intereses .

Sin embargo, como ha ocurrido en las últimas emisiones del Tesoro, los inversionistas han pedido al país pagar más.

La rentabilidad se disparó 47%, el interés marginal (el máximo que se alcanza) fue de 3.797%, el nivel más alto desde septiembre del 2008, cuando ocurrió la quiebra de Lehman Brothers, en esa ocasión se fijo en 4.35%, pero fue inferior al que se llegó a pedir en el mercado secundario de 4 por ciento.

Los inversionistas estaban conscientes de que se pediría un precio más alto para adquirir los papeles españoles, hace dos meses el interés que se ofreció fue de 2.257 por ciento.

En realidad, lo que preocupaba era que se tuvieran problemas para colocarlos, lo que no ocurrió y fue interpretado como una señal de confianza en la deuda española, lo cual brinda un alivio a los mercados; en un entorno en el que prevalece el temor de que España corra con la misma suerte de Grecia e Irlanda.

Las implicaciones de no serían las mismas, ya que España es la cuarta economía de la región. Especialistas consideran que si presenta problemas con su deuda, la magnitud de la ayuda sería equivalente a la suma de los rescates de Grecia e Irlanda e inlcuso la de Portugal.

Renuevan su confianza

El buen recibimiento de la subasta permitió que el interés del Bono a 10 años rompiera la barrera de 5.2%, lejos de 5.6% registrado el martes pasado.

Lo anterior permitió que el riesgo-país se desinflara desde los 311 puntos base que llegó a tocar el mismo día para aproximarse a los 230 puntos.

Esta menor aversión al riesgo latente sobre los países periféricos se dio de la mano de una notable corrección en el precio del bund alemán, la menor demanda continúa elevando la rentabilidad de su Bono a 10 años y ya superó 2.8 por ciento.

garagon@eleconomista.com.mx