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Tentaciones que debe vencer un buen ahorrador
Es importante que no piense en caprichos, sino en recompensas. Si se permite ciertos "lujos" con lo que va ahorrando periódicamente, la disciplina será mucho más llevadera y se animará a seguir por la senda del buen gestor financiero.
El camino del buen ahorrador está salpicado de muchos obstáculos, casi todos en forma de tentación. Nosotros queremos que tenga sus finanzas siempre saneadas y a punto, sobre todo que se despreocupe un poco de ellas; pero sabemos que no es sencillo "defenderse" ante esos caprichos que pueden acabar descuadrando sus ahorros.
Los gastos que pueden desviarlo de su objetivo de ahorro no tienen por qué ser extravagantes; quizá sean los pequeños despilfarros los que están lastrando su economía.
Queremos ayudarlo a identificar esas posibles malas costumbres para que las deje atrás lo antes posible. Puede que le sorprenda de lo que puede acabar ahorrando si prescinde de algunos gastos que quizá ni considere. Y si hay alguna duda, tenga cerca su calculadora para ver cuánto suponen al año. Aquí tiene seis errores que están impidiéndole tener sus cuentas totalmente "eficientes" en su día a día:
1. Toma siempre café fuera, nunca en casa
Esa cafetería que está de camino al trabajo es parada obligatoria para usted antes de empezar la jornada. Pagas sin problema esos 25 pesos aproximadamente por su clásico café.
Si su semana laboral tiene cinco días, estamos hablando de cinco cafés mañaneros -aunque sabemos que probablemente tome más- que suponen 125 pesos a la semana. La cuenta es sencilla: al mes, está gastando 500 pesos en un café. Al año, unos 6,000 pesos como mínimo.
Tampoco hay que martirizarse por tomarse algo un día, pero sé prudente con la periodicidad y no hagas que sea una costumbre.
2. Se ha olvidado de la tarjeta de crédito
El pago con tarjeta puede ayudarle a controlar mejor lo que gasta y dónde lo gasta. ¿Por qué? Porque todo movimiento con tarjeta queda registrado en sus cuentas.
¿Qué pasa si pierde o le roban una tarjeta? No hay problema: se cancela y automáticamente queda inservible. Incluso si llegan a usarla, muy probablemente tendrá algún tipo de seguro con su banco. ¿Y si pierde su efectivo?, delo por perdido.
3. Compras al por mayor, un gran peligro
¿Le gustan las grandes ofertas, sobre todo a la hora de llenar el carro del supermercado? Cuidado, muchas veces esas promociones que lo invitan a llevarse 2x1, 3x2, o la segunda unidad a la mitad de precio pueden convertirse en enemigos del ahorro, especialmente si tienen como protagonistas productos perecederos.
Ya que está gastando un dinero importante ¿no sería mejor evitar que terminara en el bote de la basura? Resumiendo: las ofertas "a lo grande" son adecuadas para todo, excepto para los productos frescos.
Haga uso de ellas a la hora de comprar cosas que no caduquen: pasta, conservas, papel higiénico, detergente. Pero no para nada que pueda echarse a perder, a no ser que su familia sea numerosa.
4. Compra siempre lo más barato
No estamos diciendo NO por sistema a la búsqueda de buenos precios ni a las marcas blancas, pero la típica frase de que "lo barato sale caro" tiene mucha razón en 80% de los casos.
No es malo preguntarse por qué el producto A vale más que el B, si ambos son lo mismo, pero no deje que la respuesta a la pregunta ¿cuánto vale? se convierta en su único criterio a la hora de hacer su lista de la compra, elegir su coche o alquilar un piso.
Nunca sacrifique su salud o su bienestar por ahorrar unos cuantos. Hay muchas cosas que tienen el precio que tienen porque su calidad mengua -o desaparece- si se baja de esos márgenes.
5. Ahorre cueste lo que cueste, aunque lo haga infeliz
He aquí el gran error que cometerá en su vida de ahorrador. Sí, hay que apretarse el cinturón, y sí, hay que tener controlados sus ingresos y gastos, pero no permita que una economía saneada le deje una vida personal inexistente.
Quizá tenga que sacrificar ese café diario, pero estas reglas tendrán efecto si nunca prescinde de las cosas para las que realmente quiere ahorrar, y que suelen tener que ver con su familia, amigos y su carrera profesional.
Es importante que no piense en caprichos, sino en recompensas. Si se permite ciertos "lujos" con lo que va ahorrando periódicamente, la disciplina será mucho más llevadera y se animará a seguir por la senda del buen gestor financiero.
En alianza informativa con CincoDías.com
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