¿Alguien ha visto a Arturo Chávez Chávez?

Arturo Chávez Chávez lleva 25 días de ser el abogado de la nación, bajo el mismo perfil que su antecesor Eduardo Medina Mora.

¿Alguien se acuerda de él?

De quien ya no está tal vez no, pero sí de sus frases domingueras de: Vamos ganando la guerra contra el narcotráfico aunque no se vea’’. O estamos mejor que hace 17 años en materia de inseguridad’’.

Pues don Arturo no pinta. Fue a Querétaro para ayudar a colocar la pesada’’ piedra del Instituto de Formación Policial que puso en marcha el gobierno vecino. Y de ahí partió a la tierra que nos dio héroes de la Patria. Guanajuato.

Donde echó un discurso más somnífero que el piquete que provoca la mosca Tsé-Ts钒. Desde entonces no se sabe de su paradero. Pero no porque haya sido levantado’’ por alguien, más que en su casa.

El país se cae en pedazos por la alta criminalidad que rebaso toda expectativa de narcoejecuciones en todo el país, que pinta llegar en diciembre entre 14,000 o 15,000 asesinatos de alto impacto, cifra superior al primer gobierno panista de Vicente Fox.

Pero no es tanto eso. El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) que ya no existe, desde cuando el presidente Felipe Calderón liquidó la compañía de Luz y Fuerzas del Centro (CLyFC) -su logo original- que está pensando presentar una Controversia Constitucional o Acción de Inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

El Sindicato no puede solo. No porque ya no exista. Sino que sólo el Ejecutivo, Gobernadores y Legislaturas locales tienen la facultad que demanda la Carta Magna.

Algunos líderes del PRD, PT, Convergencia y uno que otro despistado priísta y panista, tienen las ganas de sumarse a la historia y blindar’’ al SME para presentar esos recursos, a los que desde ya no teme el Ejecutivo. Que no significa que no se puedan presentar.

Pues en todos esos menesteres se requiere a alguien. Ese es, Chávez Chávez, no tanto el Jurídico de Presidencia de la República, porque esa dirección sólo redacta. Y es precisamente ese a quien se le llama abogado de la nación’’ quien tiene que presentar los argumentos y atacar de forma legal de cualquier recurso.

Pero ese puño no se ve. Esa es la verdad.

COMODATO

Dicen los que saben que doña Patricia Olamendi Torres va como caballo de hacienda’’ a ser la presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). Luego que abandonó la Procuraduría General de la República (PGR) para ser la octava postulante al cargo. La poblana y exdiplomática no está sola. Solo 350 Organizaciones No Gubernamentales (ONG’S) la quieren, será que los mexicanos la desean también. Al Tiempo.

rtorres@eleconomista.com.mx