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Política

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Chalco se inunda porque se hunde año tras año; un mes bajo aguas negras

Las autoridades municipales dicen que las inundaciones han sido recurrentes durante los últimos 14 años; el colector Solidaridad, que recibe 90% de las aguas residuales y pluviales de la zona, se tapó, dislocó y presenta contrapendientes de más de dos metros, debido al hundimiento del suelo

La tarde del viernes 2 de agosto pasado, cuando se vino el aguacero en la colonia Culturas de México, Chalco, Estado de México, Miriam González estaba en la Ciudad de México. Llamó a su sobrina para saber si había subido el agua.

—No tía, todavía no sube mucho —Dijo una jovencita al otro lado del teléfono.

Para las seis de la tarde, cuando regresó a su calle Cempoaltecas, tuvo que usar unas bolsas de plástico para proteger sus zapatos y entrar en su casa. Horas más tarde, solo se podía llegar en lancha, flotando sobre aguas negras.

Esa tarde, recordó que la pesadilla de las anegaciones en esta región del Valle de México se ha vuelto una interminable receta por entregas.

Las inundaciones en Chalco, ―donde desde el 2 de agosto pasado, más de 600 familias tienen sus casas inundadas con agua de drenaje—, es un tema recurrente, ocasionado por la infraestructura hidráulica deficiente, el hundimiento diferencial del terreno y la depresión topográfica que presenta.

En 6 años más de 9,000 damnificados por inundaciones 

De acuerdo con estadísticas de la Secretaría del Agua de esa entidad, durante los últimos seis años, en ese municipio del oriente del Estado de México, han resultado damnificados por inundaciones al menos 9,658 personas y 1,669 inmuebles fueron afectados, en al menos 18 casos de inundaciones urbanas y 23 encharcamientos. El ayuntamiento refiere inundaciones recurrentes desde hace al menos 14 años.

El problema es que muchas personas y casas son las mismas que cada año resultan afectadas por las inundaciones.

En los últimos seis años se han inundado al menos 25 colonias. Sin embargo, Culturas de México y San Miguel Jacalones, que son dos de las cuatro inundadas desde los primeros días de agosto, han padecido el mismo problema todos los años, al menos desde 2019. En tanto, el fraccionamiento Pueblo Nuevo en 2023, 2022 y 2021, mientras que la colonia Emiliano Zapata en 2023, 2022 y 2021.

Miriam, cuenta que desde que tiene uso de razón su colonia se inunda, pero ha sido una constante particularmente desde hace como 15 años, cuando se desbordó el río La Compañía que anegó varias colonias, aunque en los últimos cinco años, la situación es insoportable.

Actualmente están afectadas tres colonias; en 2023, fueron cinco; en 2022, diez; 2021, veinte; 2020 cuatro y 2019, tres.

De los últimos seis años, 2021 fue en el que más afectaciones se registraron. Ese año se reportaron 4,547 personas damnificadas; 921 inmuebles afectados. Todos ellos de 20 colonias y 21 sitios afectados por 10 inundaciones urbanas y 11 encharcamientos.

Tan solo de 2020 a lo que va de 2024, se han registrado un promedio de 334 inmuebles dañados y 1,932 damnificados por año. 

Les llueve sobre mojado en Chalco 

Para el gobierno del estado, las graves afectaciones que padecen las 600 familias por la anegación de este año, en una buena parte se explican porque durante los primeros días de agosto ocurrieron “lluvias históricas”, de 160 milímetros por segundo, lo cual se convirtió en un elemento relevante para que se generara la inundación.

Para los vecinos, lo insoportable es que cuando llegaron las lluvias de este año, todavía no se reponían de las afectaciones del anterior. Durante la temporada de lluvias de 2023, en el municipio Chalco se registraron cinco sitios afectados por inundaciones, que juntos sumaron una superficie de 58,408 metros cuadrados. 

Destaca la zona de la Unidad Habitacional Los Héroes de Chalco, de 22,517 metros cuadrados en donde, el 25 de julio 550 personas resultaron damnificadas.

Concretamente el área afectada es la que se encuentra delimitada por las calles Estado de México, Huexoculco, San Pablo y San Martín.

En esa ocasión, derivado de fuertes lluvias se desbordó el Canal Maravillas ocasionando inundaciones que afectaron a 110 casas. Hasta el año pasado la reincidencia en esa zona en específico era de tres años.

Ese mismo año también se registraron encharcamientos en la Colonia Culturas de México, (una de las afectadas actualmente por el mismo problema), concretamente entre la avenida solidaridad y las calles Toltecas, Xochiquétzal y Tezcatlipoca, los días 21 y 25 de julio de ese año y se identificó un área de vulnerabilidad de 15,506 metros cuadrados, con una reincidencia de cuatro años.

De acuerdo con el Atlas de Riesgo del Estado de México, en Chalco hay 234.72 kilómetros cuadrados de superficie susceptible a inundaciones o con drenaje deficiente, de los cuales 49.46 kilómetros cuadrados, es decir 21%, es superficie susceptible para inundarse.

Miriam, quien junto con su familia tuvo que salirse de su casa desde los primeros días del mes en curso, refiere que las autoridades les han dicho que se trata de “un problema con el sistema hidráulico”.

Aquí todo mundo sabe que es el drenaje. Por las tardes, cuando recibe la carga de todo el día, por las coladeras se ve que está ya al tope. En la noche baja pero así es siempre, explica. 

Incluso recuerda que, en una ocasión, un presidente municipal les dijo: Ustedes decidieron vivir aquí, así que se tienen que adaptar a las consecuencias; ya saben que esto se inunda. Aprendan a vivir así, les recalcó esa vez el servidor público.

Pero estar en esas condiciones no es vida. “No hacen nada por cambiarlo”.

Infraestructura deficiente

Según el Plan de Desarrollo Municipal 2022-2024, ese municipio cuenta con una red de drenaje compuesta por un emisor, nueve colectores, 17 subcolectores y una red general de 425,895 metros de red general de atarjeas.

Las aguas negras que descargan en el Colector Solidaridad (90% de las aguas residuales y pluviales del municipio van a dar a ese tubo), que lleva las aguas desalojadas hasta la planta de bombeo número 12, situada en el sur del río La Compañía. De ahí, el líquido se conduce hasta la planta de bombeo La Caldera, que, a su vez, lo envía al Dren General del Valle de México y este al Gran Canal del Desagüe, que va a dar a las inmediaciones de Zumpango y de ahí fuera de la cuenca del Valle de México, por el río Salado, hasta Tula, Hidalgo.

Se trata de una obra de infraestructura para el desalojo de agua de lluvia y residual construida a inicios de la década de los 90 del siglo pasado, durante la administración del presidente Carlos Salinas de Gortari, que corre de manera paralela a la avenida solidaridad a una profundidad de entre cinco y seis metros, la cual ya es marcadamente insuficiente.

Parte de la delicada situación se explica por el crecimiento demográfico. Cuando inició operaciones ese tubo, en 1993, recibía las descargas de aguas residuales y pluviales de cuatro barrios y 18 colonias de Chalco.

En 1990, ese municipio tenía 106,000 habitantes y actualmente son más de 400,000. Se triplicó.

El dislocado y taponeado Colector Solidaridad, es una línea de tubo de 2.44 metros de diámetro y tres kilómetros de longitud que, al correr por una zona de hundimientos, presenta contrapendientes de hasta 2.20 metros (casi el tamaño de su diámetro), tres dislocamientos y está tapado en varios tramos, lo cual impide que el agua salga. 

El secretario de Seguridad del gobierno del estado, Cristóbal Castañeda, explicó que había un tapón que obstruía 80% del diámetro del tubo). Sin embargo, eso no es lo más grave. De acuerdo con el presidente municipal, Miguel Gutiérrez Morales, el colector presenta varios hundimientos y colapsos en un tramo de tres kilómetros.

Los taponamientos se detectaron en el tramo que está entre las calles Chalchiuhtlicue y el Callejón de las Madres Solteras, en la colonia culturas de México.

Hasta el 22 de agosto pasado se habían extraído alrededor de 500 toneladas de basura que cabrían en un área equivalente a 11 campos de futbol.

Colector Solidaridad 1

La familia González recuerda que, a finales del año antepasado, el presidente municipal les dijo a sus vecinos: Probablemente el año que viene todavía se inunden, pero para el siguiente ya no, porque ya van a construir otro colector para sacar el agua del drenaje.

Y es que, en teoría, los problemas de inundaciones ocasionados por la deficiencia del Colector Solidaridad ya debería ser cosa del pasado, pues el 24 de noviembre de 2022, autoridades municipales y del gobierno del estado dieron el banderazo al inicio de la construcción del nuevo colector Solidaridad I, en el cual se invertirían 115 millones de pesos.

En esa ocasión, se dijo que la construcción duraría aproximadamente seis meses y sería en beneficio de más de 150,000 personas de 22 comunidades del municipio de Chalco y otras 450,000 de sus vecinos Valle de Chalco, Ixtapaluca y otros de la Región de los Volcanes.

También se informó que tendría un diámetro de 2.44 metros e iría desde la intersección de la calle oriente 34 y avenida Solidaridad, hasta la planta de bombeo número 12. Incluiría seis lumbreras de seis metros de diámetro y estaría hasta 11 metros de profundidad.

Tendría una capacidad de siete metros cúbicos por segundo, es decir 7,000 litros de agua por segundo.

La obra no se realizó porque un particular se fue a juicio, reclamando que las obras afectaban su propiedad y se tuvo que suspender desde noviembre de 2023.

La buena noticia es que el 26 de agosto pasado, se anunció que las obras se reanudarían como parte de un plan de rescate hidráulico que consiste en la conclusión del Colector Solidaridad I, en una longitud de 920 metros; obras de rehabilitación; y la construcción de un túnel de cuatro kilómetros de longitud.

La idea es que, al mismo tiempo, se logre la recuperación del colector Solidaridad original para que funcione a su máxima capacidad, aunque los expertos consideran que a pesar de la rehabilitación que se le haga no va a funcionar al 100% por el declive que presenta en algunas zonas.

Chalco padece subsidencia

Para algunos académicos, que han estudiado el suelo de esa región, el principal problema es que, en varias regiones de ese municipio ocurren hundimientos que, además de colapsar el Colector Solidaridad y las redes del drenaje y distribución del agua potable, la zona se hunde o cómo ellos le llaman es un asunto de subsidencia, que es el hundimiento generalizado del terreno.

Y sí, no es un asunto nuevo. En 2007, Dalia del Carmen Ortiz Zamora y Adrián Ortega Guerrero, investigadores del Centro de Geociencias de la Universidad Nacional Autónoma de México, presentaron un estudio en el que exponen que la operación (hasta entonces) de 14 pozos construidos en la década de los 80 del siglo pasado, denominada Sistema Mixquic-Santa Catarina (SMSC), en la planicie de Chalco, ubicada al sureste de la Ciudad de México, “está causando una de las transformaciones ambientales del paisaje más importantes de la Cuenca de México en las últimas dos décadas”.

Chalco se encuentra dentro del acuífero Chalco-Amecameca, el cual, según la actualización de disponibilidad media anual de agua subterránea de 2024 de Conagua, presenta un déficit de 35.9 millones de metros cúbicos anuales, pues tiene un volumen de extracción de 109.9 millones de metros cúbicos anuales y una recarga total anual de 74.0 millones de metros cúbicos anuales.

En el estudio de Ortiz Zamora y Ortega Guerrero Señalan que en la zona central de la planicie, donde existe el mayor espesor de sedimentos lacustres (300 metros), se han generado hundimientos de hasta 40 centímetros al año, como resultado de la consolidación del suelo por efecto del bombeo en el acuífero principal subyacente. 

Incluso señalan que en esta depresión topográfica se está desarrollando un nuevo lago, por la acumulación de agua superficial, cuya evolución y forma actual es controlada por la extensión y la geometría de una colada de basaltos, proveniente de la Sierra de Santa Catarina, ubicada a 50 metros de profundidad dentro de la secuencia lacustre. 

Si bien el principal problema está en el sur del municipio de Valle de Chalco,  es una situación que está en toda esa zona de la ciudad.

De acuerdo con el análisis “Detección de zonas de subsidencia en México con técnicas satelitales”, del Inegi, de 2021, Chalco y La Paz muestran hundimientos significativos en localidades de gran concentración de población con máximos de más de 20 centímetros al año; de ellas, la localidad con mayor extensión afectada es Chalco de Díaz Covarrubias.

Los González, como el resto de los vecinos de esa zona, hoy saben que se han reiniciado las obras del nuevo colector, pero no están confiados en que esta vez la obra sí se concluya, como tampoco que el nuevo tubo gigante aguante los hundimientos del suelo o que no acabe lleno de azolve y basura; ven que la ayuda llega, aunque a los vecinos de su calle pocas veces alcanzan; tienen claro que viven en una zona inestable pues al trapear el agua corre hacia una esquina y se dan cuenta que las guarniciones de sus banquetas año con año se aparran. Ellos saben que Chalco se inunda porque se hunde.

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Periodista mexicano, originario de Amealco, Hidalgo. Editor del suplemento Los Políticos de El Economista. Estudié Sociología Política en la Universidad Autónoma Metropolitana. En tres ocasiones he ganado el Premio Nacional de Periodismo La Pluma de Plata que entrega el gobierno federal. También fui reconocido con el Premio Canadá a Voces que otorga la Comisión Canadiense de Turismo, así como otros que otorgan los gobiernos de Estados Unidos y Perú.

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