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Política

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Ejército busca protegerse con Ley de Seguridad Nacional

De acuerdo con el general Roberto Badillo, las Fuerzas Armadas buscan dejar por escrito las acciones que se les encomendará.

El Ejército, la Armada y Fuerza Aérea temen sufrir el escarnio o manejo político, como ha ocurrido a partir del 2000, dicen, al ser sometidas al escrutinio público por cumplir órdenes de su jefe máximo: el Presidente.

Ponen como ejemplo la creación de la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado, instalada en el sexenio foxista con el propósito de resolver los crímenes ocurridos en la guerra sucia de las décadas de los 60 y 70.

Esto es lo que motiva a las Fuerzas Armadas a que se apruebe la Ley de Seguridad Nacional, según un análisis interno de las instituciones encargadas de procurar seguridad obtenido por El Economista, sumado a pláticas con generales en activo bajo la reserva de no ser nombrados y del general en retiro y exlegislador Roberto Badillo.

La Ley de Seguridad Nacional (LSN), impugnada por el Movimiento Nacional por la Paz con Justicia y Dignidad del poeta Javier Sicilia, no es lo que ellos piensan, se trata de dejar por escrito y en claro las acciones encomendadas a las Fuerzas Armadas y no militarizar la patria, sino devolver las acciones preventivas a las policías, ya que ésa es su obligación constitucional también , advirtió el general Badillo.

Los escenarios a partir de septiembre, cuando el Congreso de la Unión aborde el tema, es que, de no pasar la iniciativa de reforma, todo quedará igual, pero irá contra los compromisos internacionales como tratados y convenciones firmadas por México en relación con la defensa de los derechos humanos, pero en perjuicio del fuero militar y la justicia militar, pues implica que la institución pueda ser llevada a juicios en cortes internacionales.

De aprobarse la iniciativa, tendrá que ajustarse a los lineamientos nacionales e internacionales, dejando la responsabilidad al Ejecutivo federal, los gobernadores y los presidentes municipales que hayan dispuesto de la intervención de las Fuerzas Armadas en sus zonas.

De acuerdo con el general retirado Roberto Badillo, lo que menos desean las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y Marina Armada de México (Semar) es involucrarse en actividades de seguridad pública porque para eso se encuentran las corporaciones preventivas y de procuración de justicia, las cuales cuentan con un presupuesto y respaldo presidencial mayor al de las Fuerzas Armadas .

El exlegislador, quien recién publicó el libro La Seguridad Nacional, expuso que las Fuerzas Armadas siempre han estado involucradas en la lucha contra el narcotráfico porque así lo determina la Constitución; sin embargo, de no ser aprobada la reforma a la LSN, lo único que pasará es que regresaremos a las épocas de hace 40 años y estas tareas seguirán abandonadas .

Por su parte, generales y almirantes en activo -algunos parte de instituciones públicas- comentaron, bajo reserva de no ser nombrados -dado que los únicos que pueden expresar la postura son los titulares de la Sedena y Semar, Guillermo Galván y Francisco Saynez Mendoza, respectivamente- , que hicieron observaciones al Congreso en el documento Acotaciones respecto a la minuta de la LSN , del cual este diario tiene una copia.

LOS CAMBIOS QUE BUSCAN

La minuta aprobada en los primeros días de agosto, que desató la inconformidad del Movimiento Nacional por La Paz con Justicia y Dignidad, plantea la reforma de 14 artículos constitucionales, siete más serán adicionados y se inserta el título séptimo denominado: Seguridad interior en los artículos 69 al 78 constitucional,

Así como el capítulo Procedimiento para declarar la existencia de una afectación a la seguridad interior , además del capítulo séptimo, integrado por los artículos 68 al 70, denominado De la intervención de las autoridades en una afectación de la seguridad interior . Hasta ahí, en los 135 artículos que componen la Constitución de la República, no se expresa en ninguno de ellos que la labor policial debe estar encabezada o a cargo de las Fuerzas Armadas; eso es lo que en las acotaciones se pretende dejar en claro a la sociedad, a los gobiernos actuales y a las futuros, según los generales y almirantes consultados. El documento de las Fuerzas Armadas de 12 páginas propone:

Facultar al Presidente a que disponga de las Fuerzas Armadas para prevenir o hacer frente a los obstáculos que afecten la estabilidad o permanencia del país .

En su explicación, sostienen: El Presidente, al disponer de las Fuerzas Armadas, cumple con su obligación y facultad constitucional establecida en el Artículo 89 en la Fracción VI, de disponer de la totalidad de las Fuerzas Armadas permanente para preservar la seguridad nacional en sus vertientes de seguridad interior y defensa exterior; por lo que esta ley tiene por objeto reglamentar el procedimiento para que el Presidente de la República ejerza esta responsabilidad .

¿CUÁLES SERÍAN LOS ARGUMENTOS?

El mismo documento establece: Obstáculos a la seguridad nacional: contingencia, riesgo, desafío y amenaza. La explicación es que la atención de los diferentes obstáculos por parte de la autoridad se realizará con base en la gradualidad de los mismos, considerando la gravedad con que afectan a la seguridad interior; ello permite definir la oportunidad y racionalidad de la fuerza que el Estado mexicano deberá emplear en su atención bajo el concepto de que sólo existe una afectación a la seguridad interior cuando se presenta un desafío o amenaza, de acuerdo con el artículo 73 de la iniciativa de reforma .

rtorres@eleconomista.com.mx

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