La mañanera: "Las aerolíneas antes mandaban en el AICM"

El director general del Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México (AICM), José Ramón Rivera Parga, informó la mañana de este lunes que para este año se tiene planeado una inversión de 2,200 millones en obras diversas de mantenimiento, conservación y modernización del aeropuerto capitalino.

Durante la conferencia mañanera de este jueves 2 de mayo, detalló que, del total de inversión para el AICM, 1,495 millones de pesos provienen de recursos fiscales y 705 millones de pesos son recursos propios del aeropuerto.

Entre las principales obras y proyectos incluidos en esta inversión se encuentra la adquisición de 18 máquinas de rayos X y 10 equipos de tomografía computarizada para la revisión del equipaje documentado, así como la compra de 17 máquinas de rayos X y 12 detectores de explosivos para reforzar los puntos de inspección.

“Se invertirán 547.1 millones de pesos para trabajos de rehabilitación de nuestras pistas… En general, estos trabajos consisten en el corte y reposición de la carpeta asfáltica, trabajos en márgenes laterales, franjas de seguridad y trincheras, adecuación y reestructuración de recursos eléctricos y modernización al led de los sistemas de iluminación”, indicó el funcionario.

Asimismo, se realizarán estudios y proyectos por un monto de 86.8 millones de pesos para ejecutar obras programadas para el año 2025, y se invertirán 393 millones en la adecuación y reemplazo de instalaciones sanitarias, eléctricas y muebles de baño.

No mandaba la autoridad

Carlos Ignacio Velázquez Tiscareño, quien se desempeñó como Director General del AICM de julio de 2022 a marzo de 2024, informó que, cuando tomó las riendas del AICM, “quien mandaba en el aeropuerto no era la autoridad”.

“(Cuando fuimos llamados a intervenir la administración del Aeropuerto) encontramos diversas irregularidades, la principal fue el vacío de autoridad, caracterizado por la falta de orden. Predominaba la falta de comunicación y escasa coordinaciones de autoridades, corrupción en áreas de migración y de aduana, demoras en todos los procesos de servicio al pasajero", dijo desde Palacio Nacional.

“Las aerolíneas hacían su voluntad a costa del pasajero, privilegiando sus fines comerciales y al margen de la legalidad, espacios ocupados ilegalmente con una fuerte acumulación de adeudos, impactando negativamente las finanzas del aeropuerto, toleradas de manera injustificada”, comentó Velázquez Tiscareño.