Última comparecencia de Poiré ante Diputados

En su última comparecencia ante la Cámara de Diputados, a escasas dos semanas de que concluya el gobierno del presidente Felipe Calderón Hinojosa, Alejandro Poiré enfrentó la crítica de la oposición por los malos resultados de la guerra insensata y brutal contra el crimen organizado’’ que ensangrentó el territorio nacional, como afirmó Lizbeth Rosas Montero (PRD).

Basta ver las más de 250 mil personas desaparecidas en nuestro país, la quiebra económica de ciudades tan importantes en estados como Michoacán, Tamaulipas o Baja California… Menciona que las fuerzas federales inhabilitaron el 67% de los presuntos criminales más peligrosos del país y que hasta octubre del 2012 habían sido capturados o fallecieron 25 de los 37 criminales más buscados por la PGR. Sin embargo, cada vez más sectores coincidimos que este enfoque es un enfoque erróneo, ya que de cada muerto o capturado surgen dos o tres cabezas nuevas en cada territorio…’’, refirió la mujer.

Poiré aprovechó su última intervención para preguntar a voz en cuello si los mexicanos estuvieran mejor si los 37 líderes que organizaron las bandas dedicadas al secuestro, extorsión, narcotráfico, impunidad, violencia y homicidios anduvieran libres en las calles.

De acuerdo con las cifras que el responsable de la política interior del país pronunció frente a los legisladores, de enero a septiembre del presente año se redujeron 7% los homicidios, respecto del mismo periodo anterior; hubo una reducción de 11% de los secuestros; la extorsión disminuyó 58%, y 8% el robo con violencia.

Dijo aceptar y respetar la crítica, el disenso, los valores subjetivos’’ de los legisladores, porque es un demócrata’’.

Y pidió reconocer que la inseguridad no la generó el gobierno, sino el narcotráfico, como él reconocía también que la actual administración panista hubiera querido tener muchos mejores resultados y más satisfactorios’’.

Llegado su turno al micrófono, el priísta Heriberto Galindo Quiñones criticó los operativos como el tristemente célebre Rápido y Furioso’’, que constituyen una verdadera afrenta y una intromisión inadmisible de Estados Unidos de América hacia México.

¿Qué hemos hecho ante esto, señor secretario? No bastan los extrañamientos realizados por la Secretaría de Relaciones Exteriores.

El trasiego ilegal e indiscriminado de armas de todo tipo a nuestro país continúa de manera ilimitada, con la afectación consecuente para nuestro país’’.

Poiré respondió, una vez más, que el gobierno mexicano no tuvo conocimiento de ese operativo, que introdujo miles de armas de manera ilegal a territorio mexicano.

Por parte del gobierno estadounidense no hubo, en modo alguno, una comunicación solicitando permiso o siquiera informando de este operativo. Si lo hubiera habido, por supuesto que lo hubiéramos negado y lo habríamos rechazado de manera categórica’’.

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