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México adopta más tarjetas con chip
Son las tarjetas inteligentes con chip (que puede tenerlo o no a la vista) y que desde hace varios años están cambiando la forma de usar los plásticos en México.
Seguramente ha tenido alguna en sus manos: una tarjeta del Metrobús, la de Invitado Especial de Cinemex y hasta una bancaria, como la B-smart de Banamex.
Son las tarjetas inteligentes con chip (que puede tenerlo o no a la vista) y que desde hace varios años están cambiando la forma de usar los plásticos en México.
¿Qué tienen de especial? Funcionan como una pequeña memoria portátil que permite llevar determinada información de un lugar a otro, de forma segura , dijo José Garcés, analista de Select.
Teóricamente son algo más complejo: El usuario quizás no lo perciba cuando las usa, pero a diferencia de los plásticos con banda magnética, las que tienen chip son más difíciles de clonar, proporcionan más servicios y también son más prácticas , indicó Dimas Gómez, director de Mercadeo y Segmento Transacciones Seguras, de Gemalto, uno de sus fabricantes.
Es el caso de la nueva credencial del IMSS, que desde febrero del 2009 empezó a maquilar Vanget (proveedor de este tipo de tecnologías) con el Seguro Social. Con la implementación del chip le permitirá ser más que una identificación: llevará el registro de los puntos del Infonavit del derechohabiente, tendrá el historial médico del paciente, tendrá control de las medicinas que se le otorguen y hasta podrá llevar registro de su pensión.
Hay otras que parecen no ser tan inteligentes pero que también caen en la categoría, como las identificaciones de algunas universidades privadas, como la Del Valle de México y la Iberoamericana. Su chip permite que el estudiante le abone dinero, como una tarjeta de prepago para pagar fotocopias y alimentos en la cafetería, o incluso sus colegiaturas. Y para la institución funciona como un mecanismo de control de adeudos en la biblioteca, de préstamo de equipo en laboratorios y hasta para tomar asistencia en clases.
¿Es moda?
Hace unos años, la gran discusión era detectar si era viable o no usar plásticos con chip para sustituir la banda magnética. Hoy, ha quedado claro que es la mejor opción por su seguridad y practicidad. La reflexión actual es cómo adoptar el chip y cómo explotarlo al máximo , puntualizó Gómez, de Gemalto.
Se trata de tendencias mundiales en las que México se coloca en una situación intermedia.
En el caso extremo están países como el Reino Unido, Francia y algunos asiáticos, que ya han logrado que 100% de sus tarjetas bancarias tengan chip.
En México, se espera que hasta dentro de tres años, 80% de los plásticos bancarios lo tenga; mientras que Venezuela, Colombia y Brasil llegarán a 100% en un año.
En el otro extremo está Estados Unidos, en donde prácticamente no se usa la tarjeta con chip, lo que les ha provocado muchos problemas con robo de dinero en tarjetas bancarias y robo de identidad (en identificaciones con banda magnética).
A nivel mundial, quizás sólo 40% de los plásticos tiene chip, tanto en tarjetas bancarias como en plásticos de identificación.
México va bien. Culturalmente ya estamos acostumbrados a usar plásticos. Las tarjetas de teléfono nos educaron , explicó Garcés.
Vamos por más
Como es de suponerse, la telefonía (fija y móvil) es el sector que más ha explotado el plástico con chip en México, seguido de la banca con las tarjetas de crédito. Pero no son los únicos.
Se espera que muy pronto más transportes públicos, empresas de todos los giros y más tiendas departamentales las adopten como medios de pago y de identificación.