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La economía requiere jubilados independientes
Es necesario reconocer los derechos de las personas mayores no sólo como un elemento financiero sino como el cumplimiento de un objetivo de desarrollo.
La diferencia más grande entre los sistemas de jubilaciones y pensiones y de seguridad social en general entre los países desarrollados y los menos desarrollados no es el ahorro, ni en la capitalización, ni el reparto, sino es el tema de que se incluya a toda la población, cuando en realidad se podría determinar de quienes lo necesitan o no lo necesitan, así lo consideró Alejandro Bonilla García, presidente de la Asociación de Exfuncionarios Internacionales para el Desarrollo, Greycells, Ginebra y quien recibió la Medalla Liderazgo Anáhuac en Ciencias Actuariales 2022.
Dijo que esa sería la forma más fácil de solucionar el problema de las pensiones. “Eso no es probable, ni siquiera es recto, la mayor diferencia es que es un derecho. Cuando se habla de jubilaciones, se está hablando de finanzas y también de derechos que se deben respetar”.
Explicó que reconocer los derechos de las personas mayores no sólo como un elemento financiero sino como el cumplimiento de un objetivo de desarrollo.
“Hacerlo, cuesta en términos políticos, económicos y financieros, pero el no hacerlo cuesta más, se podría considerar que el precio sombra es el subdesarrollo, la pobreza es la demanda final reducida, los jubilados con pensiones de miseria no van a activar la economía y en muchos países van a ser la mayoría”.
Análisis
Bonilla García, actuario egresado de la Universidad Anáhuac mencionó que la demanda final aumenta la producción, los empleos y se requiere que la población mundial sea independiente. En los próximos años, en los países donde el 40% de la población sea mayor de 60 años, estoy convencido de que ninguna democracia y ninguna economía puede olvidarse de ese segmento.
“Uno de los retos más importantes en América Latina y en México es el tema de la informalidad, además de que la economía ahora cuenta con las nuevas formas de servicio y a través de la tercerización de algunos de los servicios donde hay patrón o no hay patrón, y con ello se van perdiendo los derechos para la jubilación”, concluyó Bonilla.