Buscar
Arte e Ideas

Lectura 4:00 min

Boda real, un regalo para caricaturistas

La prensa más poderosa del mundo no piensa fijarse límites ante lo que los caricaturistas llaman "el circo" de la boda entre el príncipe Guillermo y Kate Middleton.

Londres.- En un país donde la monarquía inspira generalmente respeto, los caricaturistas de prensa británicos han hallado en la boda de Guillermo y Kate Middleton una oportunidad de oro para burlarse del delirio colectivo que se vive en el Reino Unido al acercarse el "gran día".

Es sumamente raro que Peter Brookes, un famoso dibujante de viñetas, deje de retratar de forma irreverente en la actualidad del día. Pero el 16 de noviembre de 2010, cuando se anunció el compromiso de "Kate y Guillermo", el humorista del diario The Times no tuvo fuerza para sacar los lápices: "todo el mundo se volvió absolutamente loco", recuerda en una entrevista con la AFP. "No hice ninguna viñeta porque no quería unirme a todo ese circo".

El sentimiento era tan positivo, el alborozo popular tan enorme que Peter Brooks prefirió esperar para plasmar en su periódico a un príncipe Guillermo de mofletes sonrosados, barbilla saliente y calvicie incipiente. "La mayoría del tiempo la buena voluntad se transforma en cursilería, en sensiblería y la gente dice cualquier cosa", agregó el dibujante, elegido mejor humorista gráfico del año por la prensa británica.

Entre la cobertura ampliamente positiva de la boda del 29 de abril, los caricaturistas aportan una nota discordante. E importante, puesto que la prensa del Reino Unido es una de las más poderosas del mundo y posee dos de los periódicos de mayor tirada, el dominical News of The World y el diario The Sun (unos tres millones de ejemplares cada uno).

Y ante este acontecimiento considerado "feliz", no tienen intención de fijarse límites, o casi.

"He hecho cosas en el pasado de las que la gente se ha quejado porque la familia real tiene un lugar particular en el corazón de los británicos y, si los criticas, les molesta", explica Peter Brookes.

Pero "no, no, no, para nada", responde cuando se le pregunta si él mismo se autocensura. "Una caricatura que elogia a alguien no existe. Pero no es su culpa (del príncipe y de Kate) si el país se vuelve loco. No vamos a hacer nada que los ataque de manera personal", agrega.

Es cierto que Guillermo no tiene las grandes orejas de su padre, el príncipe Carlos, que son la alegría de los dibujantes de viñetas, y eso lo hace una presa menos fácil para los trazos burlones.

En cuanto a Kate, hasta ahora sólo hace escasas apariciones en público, pero esto debería cambiar cuando se convierta en princesa, el 29 de abril.

Otro humorista estrella, Matt Pritchett, del monárquico The Daily Telegraph, recuerda haber tenido que lidiar anteriormente con lectores descontentos.

"Hace unos años, un lector me dijo que había ido demasiado lejos con uno de mis chistes sobre la familia real. Pero pude responderle que el propio palacio de Buckingham (residencia oficial londinense de la reina Isabel II) pidió una copia del dibujo. Eso le cerró la boca", recuerda el dibujante.

El 29 de abril, "Matt" como le conocen los lectores del diario, no piensa abstenerse: "haré probablemente un chiste sobre el público que mira la boda real", señala a la AFP.

En cuanto a Peter Brookes, dice que prefiere esperar a ver la actualidad política del día para incorporarla en su viñeta sobre la boda. Al menos que, al igual que el día del compromiso, el mundo se haya vuelto tan loco que opte por dejar los lápices dentro de su caja.

APR

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas