Los 5 cabos sueltos de la reforma de plataformas digitales

La iniciativa de reforma para regular el trabajo en las plataformas digitales en México sigue discutiéndose en diferentes foros y como todo primer intento aún tiene piezas que unir, ¿cuáles son esos cabos sueltos que tiene?

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social estima que aproximadamente 658,000 personas generan ingresos a través de las aplicaciones de reparto y movilidad. De éstas, alrededor de 272,000 tienen ganancias equivalentes o superiores a un salario mínimo mensual, de acuerdo con la iniciativa éstas últimas serían quienes recibirían la seguridad social plena y derechos laborales. 

Durante el seminario Reforma para regular el trabajo en plataformas digitales, organizado por la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), abogados e investigadores señalaron cuáles son los elementos que requiere tener la propuesta impulsada por el gobierno, pero que aún no están claros.

1. No hay horas extras

Manuel Fuente Muñiz, profesor de la Universidad Autónoma Metropolitana y abogado laboralista, refirió que uno de los primeros cabos sueltos es que, para lograr un salario mínimo, los trabajadores de las plataformas tendrían que trabajar no ocho sino 10 horas.

“Es un trabajo a destajo, no está previsto que tengas las condiciones de otros trabajadores en cuanto al tiempo extraordinario, lo que se busca es que se logre el resultado de generar un salario mínimo para tener derecho a seguridad social”, explicó.

2. Se basa en una experiencia que no funcionó

El abogado advirtió que esta iniciativa se basa en la experiencia de proteger a las trabajadoras del hogar, en donde sólo 1% de estas ha alcanzado seguridad social como la que se plantea.

“En la práctica esta experiencia sólo protege a los trabajadores los días que laboran, es decir, si sólo van a trabajar lunes y miércoles serán los días que estén protegidas. Además, hay que tomar en cuenta que la seguridad social no sólo es para el trabajador, sino que se extiende los beneficios a la familia”, explicó.

3. No siempre hay buenos días

Manuel Fuentes también hizo hincapié en que el trabajo como repartidor o conductor de plataformas no tiene ingresos fijos es decir, algunas a veces alcanzan el salario mínimo y otros días no es posible.

Además de que en el proyecto no se contempla que las propinas formen parte del salario, cuando la Ley Federal del Trabajo sí lo considera.

Para el abogado especialista en materia laboral, la propuesta, bajo estos supuestos, no daría una seguridad plena a los trabajadores, sino por lapsos.

4. Riesgos de trabajo

Al trabajar en varias plataformas los conductores o repartidores tendrán una relación laboral fraccionada, dijo Manuel Fuentes Muñiz, ya que ésta comienza desde el momento en que se acepte el servicio y termina cuando se entrega o el pasajero llega a su destino.

“Pero ¿qué pasa cuando regresa a su centro de operaciones y pues puede presentarse un riesgo de trabajo, ¿quién de los patrones debe asumirlo?”, cuestionó el abogado.

Bajo una perspectiva tradicional, el riesgo de trabajo puede generarse desde que el trabajador sale de su domicilio, en caso de que se presente un accidente este se considera de trabajo, opinó.

5. Seguridad Social laborizada

Verónica Lidia Martínez Martínez, profesora investigadora de la Universidad Anáhuac, agregó que considerar a trabajadores dependientes e independientes, arrastra una característica muy arraigada del mercado laboral mexicano, y que sólo a través de un patrón se puede tener derecho a la seguridad social.

Para la especialista, el verdadero problema es que este modelo está basado en una interpretación muy rígida de lo que constituye una "relación laboral", un concepto que las plataformas digitales han transformado, ya que no existe la subordinación tradicional que caracteriza a los trabajos convencionales.

Incluso, asegura que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha realizado una recomendación donde propone que para que los trabajadores tengan acceso a seguridad social no debería ser obligatorio que tengan una relación laboral.

Los especialistas en el seminario coincidieron en que se debe seguir empujando el diálogo, sobre todo entre los principales interesados para encontrar una manera de resolver esos detalles que aun no contempla la iniciativa, y sobre todo, que no se pierdan las ventajas competitivas del modelo que ha sido atractivo para todos estos trabajadores.