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Tasa de informalidad desciende a mínimo histórico en el arranque del 2024
El trabajo subordinado y formal fue el sello de la creación de empleo en el último año, de acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La tasa de informalidad laboral se ha reducido casi cuatro puntos porcentuales de la población ocupada en la última década
En el arranque del 2024, la tasa de informalidad se ubicó en 54.3%, una cifra que representa una reducción de 0.8 puntos porcentuales en el último año y su nivel más bajo de la historia, sin considerar las afectaciones de la pandemia de Covid-19 en el mercado laboral, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
En el comparativo anual, la economía informal tuvo una reducción de 77,910 puestos de trabajo. Este descenso estuvo acompañado de un fortalecimiento del empleo formal, en el primer trimestre del año este renglón sumó 706,599 plazas adicionales a las observadas en el mismo período de 2023.
“Tiene que ver con el buen dinamismo que ha presentado la actividad económica, el año pasado tuvimos un crecimiento por arriba del 3%, tenemos un crecimiento trimestral consecutivo en los últimos cuatro trimestres, y eso nos habla de que la economía tiene un buen empuje y esto ha beneficiado que el empleo formal crezca y el trabajo subordinado con prestaciones”, explica Janneth Quiroz, directora de Análisis Económico, Cambiario y Bursátil de Monex.
En eso coincide Víctor Gómez Ayala, director de Analítica de Datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO). “La creación de empleo formal está estrechamente relacionada con el crecimiento de la economía, a medida que la economía crece más, también la formalización del empleo”.
En términos generales, estos movimientos se tradujeron en una mejora de la calidad del empleo. Además de la focalización en el sector formal, la generación de puestos de trabajo se concentró en el trabajo subordinado con prestaciones de Ley y una reducción de la población que labora más de 48 horas por semana.
En el primer trimestre del año, se registraron 59.1 millones de personas en la población ocupada, esto representa un crecimiento de 628,779 puestos de trabajo en comparación con el mismo período del 2023.
“Es un buen dato, esta diferencia de casi 629,000 empleos refleja que el dinamismo del mercado laboral fue positivo y está teniendo un buen desempeño”, apunta Janneth Quiroz.
Esto fue el balance de una generación de plazas concentrada en el trabajo subordinado (733,966) y en el renglón de empleadores (212,167). En el polo extremo, el trabajo por cuenta propia y no remunerado registraron una pérdida acumulada de 317,354 puestos laborales.
En este escenario, la tasa de desempleo tuvo una disminución anual de 0.2 puntos porcentuales para ubicarse en un nivel de 2.5% en el período enero-marzo del 2024, la cifra más baja de la historia.
La creación de empleo asalariado estuvo ligada a buenas condiciones laborales. Los datos reportados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que el 94% de las personas que se incorporó a un trabajo subordinado, es decir, con un empleador, lo hizo con prestaciones mínimas de Ley.
Tiempo de trabajo, mejora importante
Por otra parte, en el comparativo anual, la población trabajadora con jornadas laborales superiores a las 48 horas por semana se redujo en poco más de medio millón de personas. Pese a ello, aún hay más de 10 millones de empleados que laboran más tiempo del límite establecido en la Ley Federal del Trabajo (LFT) y en la Constitución.
Otro indicador clave -relacionado con el tiempo de trabajo- que tuvo un buen balance en el arranque del 2024 fue la subocupación. La tasa de subempleo bajó de 7.2 a 6.7% entre el primer trimestre de este año y el mismo período del 2023.
La subocupación engloba a todas las personas que tienen la necesidad de ofrecer más horas de trabajo de las que el mercado laboral les garantiza. “La subocupación opera en sentido contrario al ritmo de crecimiento económico, ahorita que el PIB continua expandiéndose y se siguen creando empleos formales, eso contribuye a que la tasa disminuya, el indicador había tenido reducciones menos fuertes, pero por ahora las personas están encontrando trabajos más estables”, señala Víctor Gómez.
Por sectores económicos, las actividades de servicio encabezaron el crecimiento de la ocupación en el último año. En términos generales, el sector terciario generó 815,007 puestos de trabajo, al interior de este, todos los subsectores tuvieron un saldo positivo, con excepción del comercio.
“El sector de servicios está creciendo, principalmente los servicios profesionales, financieros y corporativos. También el sector industrial generó empleo, en menor medida, pero es positivo que se genera empleo”, destaca Janneth Quiroz.
Con un desempeño más bajo, las actividades industriales también registraron números positivos en generación de plazas, el resultado general fue de 12,651 empleos, este fue el balance de los 67,469 puestos de trabajo creados en la construcción y casi 10,000 en la industria extractiva, ganancias que se vieron mermadas por la pérdida de 64,661 en la manufactura.
Las actividades primarias tuvieron una contracción general de 192,419 empleos en el arranque del 2024 con respecto al nivel de ocupación en el inicio del 2023.