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Caitlin Clark, la marca Top del baloncesto femenil
Eligió la oferta de ocho años con Nike en lugar de marcas como Adidas y Under Armour. La naciente estrella de 22 años firmó el acuerdo de patrocinio más lucrativo para una basquetbolista de la WNBA.
Caitlin Clark, guardia de los Hawkeyes de Iowa. Foto: Reuters
Caitlin Clark tiene 22 años y ya tiene que administrar la riqueza que le generan sus récords en el basquetbol. La jugadora que fue la selección número uno en el draft de la WNBA a principios de abril, firmó en primer contrato más largo con Nike y además, tendrá un diseño de su propio calzado. El acuerdo tiene un valor de 28 millones de dólares durante ocho años, sin duda una negociación respaldada por su agencia de representación Excel Sports Management, un peso pesado que también trabaja con figuras u organizaciones como Eli Manning, Taylor Swift, Chicago Cubs, Bulls, Boston Bruins, Celtics, entre otros.
El acuerdo proporcionará un buen aumento de ingresos a Clark, quien como novata de la WNBA en 2024 ganará un salario base de 76,535 dólares con las Indiana Fever en un contrato de cuatro años. La cifra de 28 millones con Nike sería la mayor jamás alcanzada por una jugadora de baloncesto. Sólo otras tres jugadoras de la WNBA, Breanna Stewart (Puma), Elena Delle Donne (Nike) y Sabrina Ionescu (Nike), tienen actualmente zapatos exclusivos. (Según se informa, el acuerdo de Ionescu valía 24 millones).
En el proceso de negociación entre Clark y Nike, numerosas marcas presentaron sus ofertas, entre ellas, State Farm, Gatorade, Buick y Bose, entre otros. Con ocho años con Nike, la jugadora podrá representar a la marca en potencialmente tres Juegos Olímpicos: en París 2024, Los Ángeles 2028 y Australia 2032.
Mientras tanto, la lista de la justa francesa aún no se ha establecido, pero se espera que Clark, quien comenzará a jugar con las Indiana Fever el 14 de mayo, compite fuertemente por un lugar. Nike, que había firmado con Clark un contrato durante su estancia en Iowa.
Clark se convirtió en un nombre muy conocido durante el último año después de reescribir los libros de récords en Iowa. Las entradas para verla jugar durante la temporada regular costaron hasta 1,000 dólares y millones de personas sintonizaron para verla en la Final Four por segundo año consecutivo.
Su atractivo parece estar creciendo a medida que comienza su carrera profesional: apenas una hora después de ser seleccionada el 15 de abril, la camiseta de Clark era casi imposible de encontrar en línea, ya que se había agotado en la mayoría de las tallas.