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Calor desafía al Abierto de Los Cabos

La semana del evento en Baja California Sur registra la segunda temperatura más alta entre los torneos del ATP Tour hasta agosto; los tenistas luchan para adaptarse.

TENNIS-ATP-MEXAFP or licensors, AFP

San José del Cabo, BCS.- Durante la semana en la que se celebra el Abierto de Tenis de Los Cabos (ATC) en este 2023, la temperatura mínima es de 26 grados centígrados y la máxima de 36. Eso representa la segunda cifra más alta de todos los torneos del ATP Tour que se han llevado a cabo entre enero y principios de agosto.

El calor se vuelve un rival más para los tenistas en el Cabo Sports Complex. A pesar de que los partidos comienzan a las 17:00 horas, cuando se percibe el descenso del sol, la temperatura y la humedad se mantienen causando estragos, además de que los entrenamientos son en el día.

“Por supuesto que esto afecta mucho, por eso ya es el último año en que se va a celebrar el Abierto de Los Cabos en estas fechas. En 2024 (en febrero), sin duda ya no habrá tanto calor y va a ser muy importante. Es muy extremo para los tenistas jugar con estas temperaturas, es demasiado calor jugar a más de 35 grados y con 70 u 80% de humedad, son condiciones muy complejas”, diagnostica para El Economista, Leo Lavalle, ex tenista profesional mexicano y actualmente analista en la cadena ESPN.

Este diario se dio a la tarea de indagar los registros de temperatura durante las semanas de cada uno de los torneos que se han llevado a cabo en el ATP Tour 2023 y encontró que el único con un registro más alto que Los Cabos fue el Abierto de Córdoba, Argentina (también de nivel 250), que llegó a los 37 grados centígrados.

No obstante, dicho torneo, que se celebró en la segunda semana de febrero y en el que fue campeón el jugador local Sebastián Báez, tuvo una mínima de 15 grados. Por el contrario, durante los siete días de duración del Abierto de Los Cabos, la mínima es de 26, de acuerdo con el lector digital de AccuWeather.

“Cuando hay tanta humedad te vas deshidratando y, la verdad, no te permite darte mucha cuenta porque no te da sed, quizás es por eso que es muy peligroso, tienes que tener muy hechas tus rutinas para estarte hidratando mucho tiempo”, agrega Leo Lavalle, quien llegó a ser finalista de dobles en Wimbledon en 1991.

El portal de la Asociación de Tenis de Estados Unidos, USTA, señala que cuando la temperatura rebasa los 35 grados centígrados los jugadores pueden cometer hasta 60 errores por hora respecto a temas de hidratación, recarga de energía y enfriamiento.

Es algo que comparte Leo Lavalle en su diagnóstico: “Con tanta humedad, en cada partido los jugadores pueden perder entre tres o cuatro litros de agua y eso te habla de lo extremo que es jugar en un clima así, por eso deben tener muchísimo cuidado en estos temas”.

El debut del británico Cameron Norrie, segundo mejor sembrado del Abierto de Los Cabos 2023, se extendió a más de las 23:00 horas locales en la noche del miércoles y, aunque la temperatura registró 29 grados, la humedad se mantenía en 77%, además de que la batalla contra Aleksandar Kovacevic se extendió a tres sets.

El ATP 250 de Adelaida, Australia, celebrado a inicios de enero, llegó a registrar 35 grados centígrados, mientras que otro que igualó los 37 del Abierto de Córdoba fue el Abierto de Río de Janeiro a finales de febrero, en tanto que el Abierto de Acapulco, también en esa fecha, osciló entre los 21 y 30 grados.

Ni siquiera torneos como el de Doha (Qatar) en febrero, Dubai (Emiratos Árabes Unidos) en marzo o Marrakesh (Marruecos) en abril llegaron a esas temperaturas, pues su tope fueron los 30 grados, a pesar de que son sedes localizadas en zonas comúnmente calurosas dentro de Medio Oriente y el norte de África.

“En Australia se juega a 40 grados con humedad y en Los Cabos no hay humedad, además, tenemos la ventaja de jugar en la noche, entonces no vamos a tener problemas de altas temperaturas”, señaló el director del Abierto de Los Cabos, José Antonio Fernández, en una conferencia de prensa a inicios de julio, casi un mes antes del inicio del evento.

“El calor está cada vez peor, cada día está más caluroso y húmedo, pero bueno, todos los jugadores estamos en las mismas condiciones”, definió el mexicano Santiago González, semifinalista en dobles del Abierto de Los Cabos 2023, tras su actuación la noche del jueves, en la que acabó empapado en sudor y evidentemente exhausto.

_¿Cuál consideras que debe ser la preparación adecuada para enfrentar temperaturas tan altas como en Los Cabos?

“Justo después de Wimbledon jugaba uno o dos torneos antes de venir a Los Cabos, pero esta vez decidí darme un tiempo libre para llegar a entrenar y adaptarme. Soy de Veracruz y allá hace este tipo de calor, a lo mejor no tan intenso pero sí bastante húmedo, pero aquí decidí llegar temprano, desde el jueves estoy tratando de adaptarme a la cancha, la superficie, el calor y todo y por ahora está dando resultados, estamos en semifinales”, respondió Santiago a El Economista.

Canchas y ambiente, el lado favorable

A pesar del lastre que puede ocasionar el calor, el especialista Leo Lavalle define al Abierto de Los Cabos como “un paraíso muy bonito que hace que los jugadores tengan un interés importante por este torneo, sobre todo porque los tratan bien y están muy a gusto”.

Ese concepto ha sido respaldado durante los primeros días del torneo con las fotografías y declaraciones gozosas de jugadores internacionales de la talla de Stefanos Tsitsipas, Cameron Norrie o Borna Coric, quienes se han mostrado contentos al conocer la playa y hasta se han sentido deseosos de “una cerveza”, como dijo el croata Coric.

No sólo el trato y los paisajes hacen sentir cómodos a los jugadores, refuerza Lavalle, ya que también las condiciones de la cancha y la ruta del calendario como preparación hacia los Masters de Toronto, Cincinnati y el US Open los invitan a comprometerse con su máximo rendimiento frente al público sudcaliforniano.

“Sin duda es un torneo que empieza a tomar mucha fuerza por sus características de estar en un lugar paradisiaco y que se puedan preparar en un lugar así para que les vaya bien en el US Open a muchos les gusta. El año pasado vimos a Daniil Medvedev con éxito aquí y llegó muy bien preparado al US Open, también lo hemos visto con Cameron Norrie”.

El US Open es el último Grand Slam de la temporada pero está precedido por dos Masters 1000, por lo que la cosecha de puntos en agosto es muy apetecible para todos los que participan desde el ATP 250 de Los Cabos. A pesar de que la jerarquía es menor, no es un pretexto para que los tenistas jueguen relajados.

“Para cualquiera, y sobre todo para los mejores sembrados, los torneos 250 son buenas oportunidades para avanzar y ganar muchos puntos. Ganar un 250 se compara con llegar a cuartos de final o cuarta ronda de un Grand Slam, son muchísimos puntos en disputa y por eso todos los que están en Los Cabos siempre están tratando de ganar”, enfatiza el analista de ESPN.

Lavalle define a la cancha de Los Cabos como muy similar a la del US Open, siendo “bastante lenta y donde la pelota bota mucho”, lo cual gusta a los tenistas porque les da flexibilidad de tiempo para alcanzarla con su raqueta.

“Creo que el tenista ideal para estas características es Stefanos Tsitsipas, porque tiene muy buen servicio, una gran movilidad y mucha potencia en sus golpes, eso lo hace el jugador a vencer en este torneo. Tommy Paul y Cameron Norrie también tienen un juego que se adapta muy bien a estas superficies”, predice el especialista, aunque Norrie fue eliminado desde los octavos de final por Aleksandar Kovacevic.

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