El otro imperio de Colombia

Boca del Río, Ver. SER patinador en Colombia es prácticamente sinónimo de éxito. Y es que hablar de este deporte en el país, es como hablar en Brasil de futbol. Por eso no fue raro que cinco de los seis oros que se disputaron en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014 quedaron en manos de ellos.

En los últimos años, Colombia ha sido potencia en patinaje de carreras y es el país que más títulos ha ganado: 13 en total, cuatro más que Estados Unidos. Desde 1997, los colombianos siempre han figurado en el podio y desde el 2000 se convirtieron en los principales protagonistas de este deporte, cuando consiguieron su primer título en la edición celebrada en Barrancabermeja.

Su poderío aumentó y desde el 2004 los cafetaleros han ganado todas las ediciones, a excepción del Mundial de Haining (China) en el 2009, donde se impuso Corea del Sur.

Tampoco es raro que la mejor patinadora de la actualidad sea precisamente una colombiana: Jercy Puello, quien a sus 26 años suma 25 títulos entre centroamericanos, panamericanos y mundiales.

El éxito de este deporte tiene, a decir de las autoridades y deportistas colombianos, muchas claves, entre ellas la masificación, la inversión gubernamental y privada, y el impulso a niveles infantiles y juveniles en todo el territorio.

Hay un trabajo muy fuerte de la federación a nivel administrativo y desde el punto de vista técnico hay mucha relación con todos los departamentos (estados) y su desarrollo , asegura Elías del Valle, entrenador nacional de la selección colombiana.

Y es que desde hace dos décadas, este país se enfocó en hacer crecer al patinaje en su territorio.

Colombia ha tenido la virtud de que escogió este deporte desde su inicio, el mismo gobierno que dijo había que construir patinódromos y enseñarle a todos los niños a patinar , asegura Alberto Ferrer, secretario general del Comité Olímpico Colombiano.

Así, se enfocó en masificar el deporte. Hoy cuenta con más de 120 patinódromos en su territorio y es el país de Latinoamérica que más espacios tiene para practicar este deporte. Pasó de tener 343 patinadores federados en 1993 a 16,500 en la actualidad y también, presume de contar con 1,600 escuelas en todo el país. Aunado a ello, buscó el apoyo de la Iniciativa Privada para tener mayores ingresos y solventar los gastos de los patinadores de élite.

Gracias a todo ello, Colombia se convirtió no sólo en potencia con sus atletas, sino también con entrenadores que llevaron la filosofía de su país a lugares como El Salvador, Guatemala y México.

En México no es sencillo ser patinador

El colombiano Pedro Páez fue uno de los primeros entrenadores de ese país que llegó a México, en donde encontró a atletas como Verónica Elías, una de las mejores patinadoras mexicanas de la actualidad.

Hoy, Páez entrena a la selección mexicana de fondo, pero México ha buscado a los mejores para desarrollar este deporte, por eso hace cuatro años contrató al italiano Gregory Duggento, un multimedallista mundial en patinaje, con el fin de llevar a los atletas nacionales al protagonismo.

Yo fui contratado por parte de Conade para seguir a dos o tres atletas a nivel nacional, luego del primer año me di cuenta que mi trabajo estaba funcionando porque los atletas seguían mis consejos, hoy sigo viendo los resultados de mi trabajo , destacó el ex patinador que puede presumir de haber logrado una plata y cuatro bronces con sus atletas en los JCC de Veracruz.

Sin embargo, ser patinador en nuestro país no es asunto sencillo. Es difícil porque pocos entienden la importancia de este deporte. Yo creo que hace falta difusión, buenas pistas para levantar el patinaje de alto rendimiento , explica Verónica Elías, quien ha ganado múltiples medallas en mundiales y más recientemente sumó dos medallas (plata 500 metros y bronce 300 metros contrarreloj) en los JCC.

Pero llegar a ese nivel no es sencillo. De acuerdo con la regiomontana, un par de patines tienen un costo aproximado de 15,000 pesos, los cuales son diseñados a la medida del pie, mientras que las refacciones pueden llegar a costar entre 2,000 y 3,000 pesos, las cuales se requieren cada mes aproximadamente.

Al principio, sin el apoyo del gobierno es difícil de solventar. Ya cuando llegas al alto rendimiento es más sencillo, porque la ayuda llega, pero creo que ahí es donde se necesita trabajar, en el impulso al deporte desde la infancia , considera Elías. En esa opinión coincide el entrenador Duggento, quien asegura que hay talento para este deporte en nuestro país, pero falta impulsarlo.

La única manera es empezar a entrar en las escuelas, tener más escenarios, llevar ahí a los niños y jóvenes, es un deporte espectacular, que no le falta nada y creo que muy pronto podría volverse un deporte olímpico , concluye.